Dedicado a la famosa escena "de amor" de El Villorrio de W.Faulkner entre el hombre con retraso y su amor imposible.
"¿No es paradójico que tantas veces el amor que nos debería expandir hacia lo exquisito y lo auténtico,nos ate a lo sórdido,nos reduzca a recluirnos en la miseria y la desgana?".
Yo que desperdicié mi juventud
con el falso e inútil chantaje de la gloria
ya no puedo echar para atrás,
recuerdos los consejos del OPUS DEI
sigo mintiendo y mintiendo, dejándome en evidencia
por una horca que no conseguiré nunca.
Ay leyendo a Kafka,a Pessoa,a Nietzsche,a Dosto
que odioso todo
reducido a un cuarto sin mesa.
Ay rodeado de enfermos mentales y malas bestias
¿siempre inventando y fingiendo recompensas?.
Pero ahora quiero vivir vivir,
como el perro que salta
y que se revienta histérico alrededor de la fuente,
como si quisiera picotear la espuma.
Sé de lo que hablo,
lo he sabido cada día de mi vida
becerro en la niebla de lejos amargado
de acabar en el Hospital Psiquiátrico.
Pero ahora quiero vivir,quiero vivir.
La prostitución era el unánime refugio
de la imaginación suprema,
de la belleza exquisita en medio
de la degradación sin respuesta,
del aliento de los soñadores
podridos de la esquizofrenia de la madre
y de la cultura podrida de Pavese,Kafka,
Pessoa o del intenso Dostoiewski,
a los que se leía y estafaba
por el chantaje de la gloria.
¿Qué queda de la sublime vida
en la ordinariez de las calles rañosas sin amor,
en el desprecio de los últimos héroes
mártires despreciados sin Dios,sin causa?.
¿QUé hay que fomente más el cáncer,el óxido,
en el rocío de las vacas del amanecer,
el vertedero radiactivo en el secarral,
la autodestrucción de los pergaminos
ajados de pentagramas,
la humillación,
la debilidad,y la perfidia?.
La literatura y la eternidad de la nada.
Pero siempre queda la vida que nos sonríe
cuando la pus llena nuestro rostro con asco,
los fresones al lago de la presa,
y las tiendas con sus tenderos
que felizmente no nos devuelven el saludo.
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