¿ A qué le sirve a mi dolor
Que aire sutil de nevada
Llegue mi grito donde el ángel
Penado a la alta montaña?.
¿Esta es la aura de los santos
Que al pecado no nombra?
¿ Hay que ser terrorista
Para acelerar la historia?.
Ando pisando el rastrojo quemado
Sin dar réplica al bufón que estercola
siento tu aliento en el fuego apagado.
El ladrido rechina como una ola
Que por el pelo al naufrago arrastra
Sin que lo eche de menos la aurora.
Y el toro que sabe que le castra
Va en procesión llorando sus ojos
Dolor de tanta herrumbre que le raspa.
El dueño que no dice ni un elogio
Enfada a las bestias por el cáliz falso
De hacer sagrado cualquier antojo.
DE indio de madera tu rostro amaso
De descargas y platos de hojalata
Donde entre el hambre hace chiste el payaso.
Bendito el que por vicio inútil mata
Y el que traiciona infantil lo sagrado
Y al que humilla hueco al que no lo delata.
Trozo de madera podrido atado
Donde la abeja que trabaja reclama
No dar sus sobras al que muere al lado.
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