Al rojo réprobo

El chiste a la maldición
el sacrilegio duro al banco,
al poli causa espanto
y odio al buen bienhechor
que exige justicia y honor.
Qué lo abatan de un tiro
digan que fue necesario,
que sea su cara un calvario
de balas sin orificio,
que lo incineren con asco.

¿El presa se volvió manso?,
¿y la grava nos da pena?,
que el amor no sea gangrena
que la rabia sea payaso
ni se berree una condena.
¿Dónde fue aquel fue destierro
quién malgastó su dinero?,
réprobo de mil locuras
sus gritos de pordiosero
con cadenas en la nuca.


¿Que no estabas en sintonía
con la luz del mundo otro día?,
no te quejes a la noche
ni hables si va a aquel coche
tus derrotas con mentira.
El enebro que retuerce
el viento el sol se merece,
con trono dado por el hado
con Apolo destilado.
No amargues lo que no crece.

¿En un beso sabrás toda
la grava que he callado?,
la lava que no ha llegado
al mar sufrido sin costa
no solo rompió mi borda.
¿Estás seguro de que
no habrías sido un verdugo,
por no perder el chalet?.
Es hiriente ese inmenso ayer
que hunde al arpón hueco y al buzo.

Charca a la alondra del honor
va el leproso por la sed,
para del cieno huir y beber,
como huye del primer amor
con miedo y con rencor.
Muerte al rojo demagogo
como el suelo ante el ahogo,
la patria ansia paz y un sueldo
hay que mandar al infierno
al que crea tanto sonrojo.