1ºDefensa de la ficción, de la mentira por grandeza o por explicar mejor la belleza o la realidad ,y de los proyectos en que un hombre quiso ser todos los hombres

2º Paranoia estética de los catalanes.




           1º Antonio  Gamoneda en un famoso poema en contra de la mentira que aparece en algunos albergues del Camino de Santiago acabó haciendo una defensa bella y seca, muy castellana, a favor de la  hiriente verdad,(defendida por un lírico de segunda fila) o sea tal como él la conoció la de la mediocridad del villorrio castellano, y del linchamiento como forma de honestidad. Muchos dirán que en un mundo donde reine la ficción es imposible vivir. Pero la ficción es lo único que nos permite vivir y nos alivia del sueño cuando miramos a lo alto,la luz del sol.   Pero siguiendo el ejemplo  de los pueblos mesetarios en un mundo donde no hay respeto a la dignidad, la mentira o el solapamiento se convierte en el único acto de amor contra la áridez y la mediocridad.  No hay que ver sino ese desprecio por la ficción en el canon de la alta literatura española y su amor por lo costumbrista ramplón y por la picaresca arrepentida o moral. La verdad nos lleva al páramo repetitivo de olmos resecos de Antonio Machado.


 Cómo los abogados parece que hablan mejor que los filólogos españoles hasta dando sus números de cuenta, sólo por la cautela,por guardar el tempo, no por la gramática. El derecho es la defensa de la sutileza, no para defender la belleza o la imaginación, sino las mentiras racionales que recrea relaciones de poder. La Ley es rígida y dentro de ella uno puede volver cuando se desmandan las falacias desde el estrado.

Hay personas de enorme cultura sin una carrera universitaria a los que les falta sistematicidad en sus conocimientos, o profundidad para decir la verdad objetiva. Y tienen  que suplirla por la "verdad literaria", o sea por la imaginación de lo que pudo ocurrir,o por lo que psicológicamente es aceptable que ocurriera. O sea por la mentira, la nihiltoria, o lo aceptable sicológicamente.
       Con libelos de leyendas urbanas barriobajeras escribió Stendhal La Cartuja de Parma que explica mejor el ambiente de la Italia Napeleónica que cualquier reportaje histórico, incluso con todas las exageraciones folletinescas de fugas o grandes pasiones de la novela. La ficción o sea la mentira, encuentra más potencial de la verdad que la propia verdad.


      Recuerdo al pensador o filósofo de la historia Pepe López que atribuía el mismo valor a la violencia ejercida para hacer progresar a la democracia o para implantar una sociedad islámica o autoritaria, o anécdotas increíbles de superación a Yukio Mishima.

    Mishima (Japón 1925-1970) aunque un genio orquesta no llegó a muchas proezas que se le atribuyen, como por ejemplo ser un modisto a la altura  de Hugo Boss (otro ultranacionalista), o de ser un karateka supremo aunque fuera muy bueno, ni un jurista prominente ( aunque acabara  Derecho con 22 años y consiguiera un puesto en el Ministerio de Economía con 23 años. Sólo fué un genio consistente en la literatura.    Pero son mentiras de un seudoMishima que hubiesen podido ser desnaturalizándolo y que lo explican psicológicamente pero que no explican los obstáculos reales que debió pasar como todo individuo en la vida. Sólo la ficción puede explicar una mentalidad tan escindida (occidental-cristiano o samurái anacrónico y pensador vanguardista. Aislacionista y sin embargo vanguardista occidental) y de personajes tan incoherentes,autodestructivos, confusos y que por su voluntad o extraña inteligencia sobre la vida y ajena a la vida de Mishima serían imposibles en España, y sin embargo muchas protagonistas lésbicas dentro de su abyección de Mishima tienen un raro sentido calderoniano del honor. ¿ Esto cómo es posible?
                 Es ficción que rellena los éxitos y la turbiedad mental de un pensador pródigo, o sea López, Pepe , sin una sistematicidad ni exactitud minuciosa pero sí una comprensión psicológica del genio Yukio Mishima.


                                                


El ejemplo clásico es del inmaduro Salvador Dalí que como pintor quiso ser todos los hombres, y que lo consiguió por un momento de forma más convincente de lo que lo hizo Walt Whitmann en su obra poética. Mientras Whitmann hizo un catálogo notarial y reivincativo del esfuerzo y del sufrimiento de gran parte de los hombres y del paisaje suntuoso norteamericano, Dalí quiso ser el mismo pintor en todos los hombres, y no sólo se autoatribución en todos los movimientos según iban naciendo (hiperrelismo metafísico,pop art, op art,brutalismo...), sino influencias en artistas lejanos a su sensibilidad( de Kooning, Lichtenstein,Andy Warhol...).
     Con una mentalidad infantil propia del medievo, tan importante como con unas ansias irrefrenables de ganar dinero firmaba cuadros en blanco para que otros pintaran encima, para poder vender cuadros a precios de fortuna. Por supuesto, lo hacía de forma descarada y cutre por lo que hay multitud de falsificaciones que tienen un valor propio. Son los seudoDalís, igual que en la Antigüedad los eruditos firmaban en nombre de autores célebres para que alguien los leyera, respetando la autoridad de lo escrito, y son falsificaciones ya consagradas con un precio propio.

 Es notorio que Dalí era un gran mentiroso, o sea ficcionador, y que para educorarlo incluso sus admiradores lo llaman exagerado. Pero con sus mentiras daba profundidad a lo anodino de la vida incluso de la clase alta con la que convivió.  Su anécdota de cómo le miraba con sensibilidad Alfonso XIII cuando fué a visitar la Residencia de Estudiantes por los años 1920 y como le miraba con complicidad mientras golpeaba el cigarrillo, es algo tan inteligente que hasta su protagonista Alfonso XIII lo hubiese considerado una " burrada".

Dalí estaba tan obsesionado en amontonar traumas,cuadros de ideas o tramas imposibles e inconsistentes,que tiende a embarullar vidas,motivaciones,cuadros etc. ese proyecto infantil es parte de su grandeza que nos saca una sonrisa, y que triunfa para siempre de la tragedia humana de que sólo podemos ser una obra que se repite constantemente. Nunca nos preocupa que Dalí en Sus Rostros Ocultos triunfa cierta simplicidad o incoherencia,sino porque se consigue ese amor a un mundo muerto ya en aquel momento: la mentira sublime de los Imperios antes de la Primera Guerra Mundial que no pudieron repartirse pedazos de su supremacía mundial,de su moral,de su estética,de su acumulación científica de siglos...

Curiosamente, uno tiene más respeto a la belleza natural y a la moral sana( no a la decimónonica), que a la verdad estricta o a la elegancia... ¿Cómo se puede explicar esto? porque la ficción eleva,dignifica,da vida, y explica mejor lo que es el hombre ajeno a sus limitaciones...



2º  Si algo gusta a los españoles latinos es la brutalidad y el vozarrón agresivo que impacta. La elegancia no recargada es más italiana,más de la costa,que intenta entrar como la ironía más lentamente. La catalanidad si ha llevado la contraria a ese sentido español es no a través de la religión protestante pues son católicos, ni de la política liberal porque sólo son cuando les interesa porque tienen medios comercial de distribución sino a través de la moda,el diseño o sea, de la estética.

 Como se sabe el  diseño modernista penetró más en la esencia de Cataluña que lo que lo hizo el prerrafaelismo en la estética victoriana y que no quedó en el estilo y el gusto por lo vintage.El prerrafaelismo impacta, su gusto por la belleza forzadamente perfecta y uno exige su reivindicación de la misma forma que cansa rápido con una fiebre mala ,de esa busqueda paranoica de la belleza perfecta y elegante.
 En Barcelona se busca la originalidad elegante,espontánea pero que se note que ha sido buscada, y que se note ese esfuerzo por encontrar algo artificioso: las mujeres teñidas,con el corto, con la figura menuda, de pocas curvas buscando la contraposición al español que sale con lo que pilla, o los madrileños de clase alta con su elegancia de abrigo sobrecargada.