Diría Goethe cansado de la alienación sentimental de estar aprisionado en un ser humano, querría buscar la carnalidad olímpica,la concreción de la imaginación y la maternidad cómplice de estos encuentros sin complicaciones.Hay mucha imaginación concretada y una maternidad ante la fragilidad del ser humano.
De Galdós se diría iba de amores mercenarios,y si alguien le pedía dinero se lo daba sin pedir explicaciones exhaustivamente.Era generoso con quien no debía,a quien le daba sablazos por su fama.
De Goethe se replicaría su personalidad universal no le dejaba excluir los placeres que le devolvían al sentido telúrica de la humanidad esencial.
De Galdós se diría tenía un estilo chacabano,le estilo llama lírica y en cierta manera le atraía ese placer furtivo,sin compromisos.
Al final veríamos el prólogo a la obra del genial alemán y la rúbrica: Rafael Cansinos Assens. ¡Rafael Cansinos Assens!si estamos entre amigos. El que sabía tantos idiomas,el infatigable traductor,amigo de Borges. Y con una lágrima que no logra expiar el ojo, nos diríamos ¿quién hablará de nosotros de esa forma tan delicada y exquisita como de Goethe?,¿un familiar que nos hubiese conocido íntimamente?por supuesto que no,ni de broma¿un conocido,un amigo?no,nadie. Solo nosotros podemos imponer ese tono al hablar de nosotros.
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