De esta facultad sale
el zorrillo independentista,
hasta que te santigua un mapa
y te endereza la vista.
Con el gorrillo del payés
el olentzero las monedas,
no se queja de ser cipayo
sino payo sin chequera.
La bandera desteñida
delata a los chinos,
que no me pidan lejía
para desteñir amarillo.
Con golpes en el pecho
monedas cantan el himno,
mientras nos cosan las balas
y a Fueros los bolsillos.
Unas bragas al hocico
para que huela a la presa,
que es un paraíso fiscal
y envidar la independencia.
Con la equis inglesa al parchís
Con la chapela gorda,
caen las ayudas fiscales
como si fueran moscas.
Esta bandera parece
como un tres en raya,
y consigue más derechos
el que primero saca.
-La cuerda de la bandera
que nos ahoga
es española.
-Pues no interesa.
-Patriotas somos.
-Vete a la mierda.
Viendo asfaltar autopistas
quién no invoca a la raza,
el grito en el callejón
es una berrea de caza.
Tahúr en obviedades
Con un habla quedo,
el vitriolo de la boca
de arcilla quema el dedo.
Y aunque aprietes la boca
y aunque niegue el pescuezo,
ser español querrá en contra
para los presupuestos.
El arco iris de los drags
defenderá con el turismo,
y el Guggenheim poco vasco
será euskaldún sin timo.
La fábrica amasijada
de raíles oxidados,
grillo criquea los billetes
sobre un fértil descampado.
Grillo criquea los billetes
es el genio del euskera,
el eusko lo apellida todo
el don de la chequera.
La sierpe sobre el habla
fue el negocio de ETA,
y si no fue una farmacia
es porque no vino Hacienda.
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