Alicia atraída por la madriguera

Alicia atraída por la madriguera

sábado, 28 de junio de 2014

La historia del cateto Robert Johson (1911-1938) del Misisipi que supo crear su estilo blues, su poética y su leyenda








Todavía un hombre en la miseria puede chantajear con algo: con su alma.

Me encanta cuando es el tonto el que cuenta las historias. Cuando saca a la luz un punto de vista insólito con total naturalidad desde dentro. No una descripción de una historia. Sino una confesión que sale a borbotones, con vergüenza o angustia.

 Que cuesta entenderla a pesar de las palabras sencillas. Una historia contada desde dentro. No un paso fuera, un paso dentro.  Con un voz ronca y un sonido mohoso de guitarra. Dios ¿por qué a ese hombre nadie le compró una guitarra nueva?.

Ojalá pudiéramos vender nuestra alma al diablo para tocar bellas canciones de improviso ante el solitario micrófono: parece la cabeza de un matón que embiste. ¿ Y por qué no vendió su alma para pulir de verdad sus letras?.

Un hombre que no respeta a la mujer del dueño del bar que le da de comer esa noche tiene miedo de encontrarse en la noche en un cruce de caminos para que Satanás no le rinda cuentas.

El satanismo profundiza y promueve el estabo morboso de autodestrucción del que vive en la miseria de los chamizos ce las correntías y le da aureola de dignidad. La música y el sortilegio de su letra breve lo invoca, lo evita y prohibe que vuelva. Es una especie de terrible amenaza comunista de los peones de la guitarra fuera de temporada sin reacción conservadora. Lo ataca todo sin temer la reacción de nadie ofendido. Y llama mi Dios como un compañero que entra en la sala  a oscuras de tortura.
¿Qué grandioso que aún podamos venderle algo a alguien en la miseria? y no sólo nuestra música sino nuestra alma cuyas disonancias no las capta siempre la sublime música.

Sweet Home Chicago es la canción más hermosa de los barrios bajos para amar a una ciudad en su apogeo de dinero.Uno se imagina mudanzas, los gestos nerviosos de algún pillo o una mujer embarazada y tener que convivir gentes de clase baja de diferentes etnias que se desprecian con sus prejuicios que se contagian, y tienen que respetarse hasta amarse.

Y en las cavernas del cráter de los gestos, los suspiros de desprecio, de las insinuaciones esta Satanás. El hombre de color reducido en una sociedad desarrollada que lo aísla de la abundancia que producen sus fábricas malolientes...Satanás camina en el tufo de la madrugada con la niebla camino al trabajo o al cole.
Lo que nos aterra de Satán es la tortura psíquica y física perpetua, las deformidades de la cara. Satnás quiebra las estructuras sociales y es algo atávico en la noche y nos dice: "conseguirás el genio sin tener que esforzarte más". La locura de la mentira perpetua, el sufrimiento sin excusas y el abandono y la nada que tiene anclajes con la vida.

Sólo quien es completamente anónimo puede ser un endemoniado o un torturador.
 Torturado-torturador son seres libres que deciden destruirse, uno su psique y su cuerpo sano y otro una cierta idea de moral: el torturador es un dios destructor que tiene que crear un Mal.
El satanismo de color es bastante ingenuo, propio de alguien que no conoce más que su mundo. Es casi tan ingenuo en su sufrimiento que da vergüenza ajena. La solidaridad sexual en la miseria, las amistades entre las que hay un abismo y te despellejan vivo a sólo 7 metros de distancia.
"No se puede encontrar una buena amiga, el invierno va a ser lento, este es el destino soso.Mejor que entres en mi cocina, que fuera va a llover..."  Parecen frases sueltas con un tono monocorde fantasmal y semianalfabeto que conmueve.

El satanismo de color parece salido de un entumecimiento cerebral de un ambiente cerrado y miserable. Casi recuerda la mímica de Charles Chaplin también salido de un ambiente de bajos fondos sin argumentos pero con voz ronca y repeticiones neuróticas.
La única diferencia entre la ingenuidad suave de la miseria de Charles Chaplin y la de Robert Johnson es que este nunca salió de la miseria. La promiscuidad,el nomadismo, un sentido elemental de la vida...


En una noche en el escenario de un tugurio donde tenía que actuar apareció una botella de whisky abierta. Le había tirado los tejos a la mujer del dueño como solía hacer. Un compañero le dijo que no bebiera que no sabía que podía haber dentro. Esa misma noche murió. Por supuesto nadie le iba a hacer una autopsia en condiciones ante una muerte tan extraña. ¿Para qué? No valía la pena.

Tuvo la astucia inconsciente de dejar su leyenda en sus canciones ante un público ingrato, de circunstancias. Y los productores que iban a ganar dinero de él hicieron el resto: que en las canciones parece que se oyen dos voces cuando sólo estaba él,
que ensayaba de noche en los cementerios,
que cantaba siempre de espaldas a la pared,
que en directo tocaba siempre a oscuras para que la luz no enseñara sus ojos rojos,
la perfección de su guitarra rota con las tapas de la botella...

Apenas hay frases en su música: suelen destilar sadismo y queja, la imposiblidad de penetrar en el alma del otro...las personas de color vivían en una cierta alienación de su dignidad y su satanismo también es su queja que no recibirá reacciones desproporcionadas.

Pocos saben definir  con potencia su infierno personal de una forma poética en cada blues. Crear su peculiar leyenda  en un mundo tan reducido de abyección, sexo rañoso e ignorancia hasta que los más palurdos la depuren. En un porche de miseria mientras llueve y una esposa huye con alguien estúpido al que acaban de coger por robar o cuando alguien sin talento pasea con el diablo en un cruce de carreteras para ir a pegar una paliza a su mujer "que dice es sin motivos". La promiscuidad llena de barro en ciudades de madera que siempre están por hacer y una extraña envidia para dañar al máximo al compañero, al hermano.
 El mundo "negro" como algo atractivo que toma conciencia e hiriente con sólo una guitarra gastada de mala calidad.
Sin significados rebuscados, desde la abyección creó versiones eternas de su historia. Su milagrería.
Lo peor de todo es la dificultad de muchos músicos para vender su alma... a cualquier discográfica.



                 *               *                        *
Las dunas cambian de sitio en el desierto
si no hay una piedra que les fije.
Y las cenizas  de los muertos cambian
si no hay recuerdo que les sonría.

¿ Qué sentido tiene venderle el alma al diablo
toda la eternidad?¿ para qué la querría?
un músico genial que muere con 27 años
un escritor de una única obra maestra
un inventor de un invento prematuro
torturarnos para no tener que explotar
todo nuestro potencial para una chispa.
Quizá creemos que nuestro dolor es lo único
que podemos ofrendar por la falta de la voluntad...
y lo peor de los pactos satánicos
es que no podemos.

La falta de voluntad es una escalera
que necesita un punto de apoyo.




Ay hay que seguir viviendo
para ver que todas aquellas cosas
por las que uno hubiera malvendido su alma
no eran para tanto.
Y a pesar de los muertos seguir soñando.
Que aquel cañaveral que nos rajó los brazos
para abrir un camino, era insignificante.
Tardé en reconocerla y supo ignorarme
cara a cara.
Entonces supe que el amanecer nos cierra
los ojos para saber que esta ahí
y que no le signifiqué nada.
Las baldosas de granito llena de pegatostes
vieron una cabalgada de recuerdos
sin honores.
¿Cómo puedo hacer grande aquellos recuerdos
sin historia y dar belleza a un borrón
que difuminan las farolas en la noche?
Casi 15 minutos pensé en presentarme
aunque me daba la espalda como los torturadores
que dejan coger aire a mártires sin nombre
y no quise incomodarla.
Miraba un descampado con muros caídos
 perros hurgando en la herrumbre
y palmeras que brillaban.
Todo para no verme en la noche.
Nunca le invité a un café
para hablar de trabajos
donde una lleva vestido y tacones.
Era más menuda que como la recordaba...
¿Quién vea este paisaje árido
 podrá ver mis sueños?
Se bajó del autobús dándome la espalda
no quise esta vez que se cayera
y se rompiera la cabeza.
¿Alguien verá mis inventos
que no sabría nombrar con palabras?
¿Mis batallas, mis novelas?
Acabe orgulloso de no molestarla...







martes, 24 de junio de 2014

3 años y medio de la muerte de su padre.(ficción)



Los interruptores siguen encendiendo la luz
que lleva a tu rostro que ya no está.
Quiero dar las gracias y no hay nadie
abrazarte y no hay nada.
No fuí a verte 5 meses antes de saber
el sendero de tus nidos de araña
ni para darte el abrazo final.
Mi hermana dijo que te incineraste
para que no te escupiera en la cara
-¿es que  aún no lo conoces?.
Y sujetó una escoba para pegarme
aunque ella sentía lo mismo sin amarme.
No llamé a tus sobrinos en tu funeral,
les envié un mensaje alegrándome de tu muerte.
Ni para darles un abrazo final.
Gracias por todo. Por la vida, la luz, el color,
los sonidos de los motores de los coches
a lo lejos en la noche
por la fachada de enfrente en las ansias de amor.

Cuando uno corre con ansia de amar
y busca entre los clientes del bar...
¿qué pasa cuando pedir perdón
no tiene sentido sino amar...?
¿Cuándo uno siente
que no tiene sentido?...
Quiero dar abrazos a todo el mundo
y correr por el pasillo culpando a todo el mundo
y gritar por las grandes calles de madrugada
para despertar de alegría a todo el mundo.
Todo es perfecto aunque la vida
haya ido de socavón a catástrofe y socavón.
Aunque haya llevado la contraria
sin saber lo que decía sólo por llevar la contraria.
Aunque me hayan cogido en una mentira estúpida
y haya insistido en mi mentira
encendiendo la ira de la gente.
Aunque me hayan dejado en evidencia
y para hacer las paces haya sido yo
el que me he esforzado en humillarme.
Aunque me hayan desvirtuado
mi historia cierta y me hayan dejado por mentiroso
sin yo defenderme callado delante de mí.


Pero hasta el odio de la vida desperdiciada
pasa. Y yo escribo en la noche de angustia
como un fantasma en un monasterio
pidiendo agua
y flores mustias.
Ya no se descubre tu rostro
en la muerte del ángel custodio
de estas paredes blancas.
Hay que tener sentimientos fuertes como el odio
y el egoismo para no pasar por un idiota...
pero cuántas veces ve uno
cómo se arrepiente de esa pasión que le hace falta.
Aún recuerdo cómo racaneabas el dinero
como no quisiste pagar mi matrícula de la Universidad
o como me mirabas para que me sintiera culpable
por llevarme a un restaurante algo caro.
Cuando me decías que tardaría
en hablar bien español 2 años
y que lo hablaba como un marica
y que por eso repetiría en la Universidad.
Ahora que rompí tus 500 fotos
lo veo con nostalgia.
Haciendo peldaños desgastados
para salir del pozo.


Uno siente que vuela cuando recuerda
sin nostalgia recuerdos de angustia...
y ese olor a flores mustias
y la gasolina en la guagua trasera.

Ya no era el niño
que  al oír la llave en la cerradura
salía corriendo por el pasillo
para abrazarte sin dudas...
Ni un profesional de éxito
ni un mujeriego con marcha
ni un viajero con historias
ni un padre con sus muchachadas.

El suelo de Dasein me parece más blando
que el de Europa
y las luces amarillas son más baratas.
Aquí no hay campo y uno no sabe qué respira
-quiero oler cómo se queda la estopa-
pero la vida sin recuerdos es cómoda.
¿Para qué me voy a enfrentar a mis recuerdos
y a lo que no he vivido?
Tu recuerdo es elegir  viaje
entre Turquía y Egipto.

miércoles, 18 de junio de 2014

La exiliada saharaui de Valdenuño, despedida en Koria.

Ayer tuve un recuerdo
viendo la tele, de Koria...
hizo güijas con las macetas
con su bici cabriolas...
que pasó como un desfile
sin ver los cadáveres de su gloria...
ni sus batallas perdidas
sin nombre de amapolas.

Cómo la odié por sus risas
por verme conducir ido
como si llevara una carretilla
de hierro fundido.
Aprendiendo a conducir
por un pedregal de cencerros
saltaban las pedradas
de los inútiles muertos.

Deseé su destierro al desierto
donde no llegaron los muertos
y donde los cartagineses
dejaron leyendas sin puerto.

La hermosa niña de Koria
con sus pechos que parecían
dunas que se movían
caballos desbocados sin memoria.
como petróleo en desaladoras
su piel morena era
y le molestaba esa gloria
como a otros sus penas.

Por el rancho de lentejas
le molestaba dar las gracias
y con la fiebre sin sueño
invocaba a su cabra.
La hermosa niña de Koria
fingió ser francesa
cuando llegó de madrugada
como una huida presa.

Traicionabas a tus muertos
decías traicionabas a tus muertos
cuando restregabas tus cuernos
en los cantos rodados del río.
Amabas tus bellos amuletos
arrogante desafío.

Te acusamos de niñata
ay qué gracia y de pijotera.
Pero en la madrugada
trabajaste con las cigüeñas.
Tanto duro trabajo
no dejó en la feria producto
contamos al cura tu fe
dijo bah y soltó un eructo.
Pediste con tu sonrisa
 dando tours con tus bicis
para huir a Madrid
hasta en las paradas hay Crisis.
Bella Vírgen sin atrio
periodista sin guerra
tus sueños sin mecedora
son dignos de princesa.
Me veían feliz
con tus desatinos
manadas de cigüeñas
sin destino.
Mi amigo pa joderme
me hacía preguntas ridículas
¿ qué sientes si ni tus amigos
van a ver tus películas?

Y cuando no hubo remedio
con un alehop
te quitaste de en medio
para nuestro estupor.


Y con la cabeza baja
como un franciscano pasillo
a la mazmorra viste la última vez
forzando los ojos sin brillo
nuestros descampados sin carteles
como si fueran el paraíso.
¿¡ Cómo vas a echar de menos
este pueblo de mierda!?
aburridos de nuestras envidias
con los chistes de taberna.
Partidas de mus de notario
las zapatillas de esparto
y el falso Dios que nos hace huir
un televisor en lo alto.
Mirabas sin palabras
sin gasolina tu llanto
un colador abollado
de golpes cansado.
Hicimos un concurso
de fotografías raras
y nos sacaste a las veletas
que te recordaba a tu cabra.
¿ Cómo nos recordarás ahora
en tu desconsuelo?
¿seremos galgos rampantes
o manchas de té en el cielo?


Tus gestos de teatro
y como dejabas las colillas
en las latas de refrescos
como nosotros te enseñamos.
Sí como el tabernero
se bebió lo que sobraba
y se tragó las colillas... por tacaño.

Y cómo nos reímos
de tu sufrimiento inútil
de tus lágrimas presentidas
como de charlatán dúctil.

Y cuando no hubo remedio
con un alehop
te quitaste de en medio
para nuestro estupor.



Por tacaño...
Pienso en el hueco de las ruedas
 del camión donde durante horas
 estuvo tu paisano.
Estarás pasando hambre
con tu cordero sin grasa
pero vestida de azul
no tendrás que dar gracias.
Me sorprende que amar rechinando
a una chica hermosa en los arrecifes
o tener demasiada imaginación
no cree sentimientos sublimes...




               

                  *               *               *
No quiero defender algo obvio, de sentido común
como una sierra húmeda cortando azulejos ...
quiero defender algo indefendible en ristras
¡pero tranquilos! no pretendo insultar a inmigrantes
que venden figurillas del Imperio
a la salida de Versalles a los turistas,
ni extraditarlos, ni quejarme de que huelen a salmón,
ni de cómo venden baratijas por 2 euros
para poder llevarse algo a la boca, ¡no!.

Sólo soy un hombre y no puedo salvar el mundo
cada uno tiene que buscarse la vida
e ir a lo suyo.


domingo, 15 de junio de 2014

Cómo enseñar a hacer las cosas. A martillear dándose en los dedos.

1º ¡ Elogia!. Saber corregir 
( a nadie le gustan las correcciones con amor a grito pelado aunque vayan precedidas de cien elogios, evitar gritos, golpes):
                         eres un tipo inteligente pero lo deberías plantear de otra forma
                        está perfecto pero...  y después las 100 críticas edulcoradas...    
                         es una pena que con todo tu potencial por las formas lo pierdas todo...
Hay que elogiar hasta que den ganas de vomitar.

2º No imponer tu ego en criterios absurdos sino por algo grande: TODO el mundo quiere ser alguien y luchar por algo grande pero manteniendo su identidad,su ego. Defiende tu prestigio.

3º Rodearte de gente no problemática y con ideas:la mayoría de la gente tiene grandes ideas por reacción o que están en la calle, pero pocos quieren trabajar por ellas. Hay otra gente que tiene grandes planteamientos y hay que insuflarlos de vida.

4º No ir a por grandes proyectos que valen mucho dinero sino poco a poco:
No obsesionarse con la dicotomía éxito/ fracaso, sólo los grandes proyectos son éxitos ¡no!. Sólo los proyectos auténticos, bien hechos triunfan.
Saber entrar, no agobiar,

5º Actuar con nobleza hasta con la gente problemática hasta que te puedas separar de ella:
Hay que dormir con un cuchillo entre los dientes para defender tu prestigio.

Trabajar gratis para los demás es una estupidez aunque uno trate de devolver favores o crear espíritu comunitario. Cómo la gente no valora el esfuerzo,no lo ve, sólo se fija en los fallos y es desagradecida,te grita,te corrige a lo bestia y siempre en público. Y eso está bien porque te obliga a recuperar el sentido común y ponerte en tu sitio.
Ver el producto de la imaginación de los demás es un acto de simpatía. Enseñar a crear es un acto de amor.

Comparemos la creatividad de Telde una ciudad con 100.000 habitantes y con espíritu "de pueblo" dormitorio con la capital. En Telde, Radio Faycán con su programación limitada es una emisora creativa y del pueblo. Se recitan poemas,se hacen proclamas en favor de la identidad, se citan para fiestas maratonianas, se informa de talleres de cine donde sí se hacen cortos y se proponen programas outside como en el que las madres aunque las identifiquen llaman a sus hijos que las escuchan desde tal módulo de la cárcel... eso es poesía,ambiente acogedor,creatividad...
además con un espíritu incluyente, universal, sin intelectualismos retóricos, todo a pié de calle.
Lo primero que quieren demostrar las emisoras en Las Palmas es que tienen un barniz intelectual y te recitan a Cortázar,te ponen proclamas sindicales de las pérdidas de derechos,análisis económicos sobre beneficios empresariales y otras cosas que apabullan y repelen.

La primera clase del Taller de Cine en la Casa de la Juventud fué desfasar para crear argumentos y que los compañeros desfasaran más para rellenar las lagunas y relacionar más a los personajes. Ver las evidentes influencias que tendrá tu bosquejo de guión. Y después recortar las estridencias y pensar en rodar lo posible. Por supuesto al final todo tendría un toque surrealista necesario para explicar a las personas que actúan. Los profesores exigen que les pregunten para seguir explicando con pasión y enseñan su estrecha visión de realidad que van a usar en la práctica no algo sistemático de la semiológica polaca que sólo sirve para crear comentarios deconstructivistas.
 Al final puede salir una comedia costumbrista chabacana pero eso tendría más vida que alguien encerrado en su cuarto con balcón sobre la levedad del ser y lo efímero de la vida.

 Eso en la capital es impensable, desde el comienzo las ideas motrices no pueden ser "burradas" y el guión debe ser medido. Todo debe nacer en el orden, crear una buena trama original es tan difícil que uno se dedica a copiar historias pero con frases propias de reacción, por lo que uno se siente ajeno a su historia. Y recurre a lo documental para dejar rastro de algo de su alma.
        Y enseñar a los clásicos lejanos para defender aún más un cierto orden no creativo, que no te arrastra con los sentimientos de la vida. Tanto en los Talleres de Cine como en el Politécnico se enseña a ser un neurótico. Enseñar a hablar técnicamente, no arriesgarse,ser cauto, actuar como si uno tuviera que defender su prestigio. Como consecuencia muchas historias acaban con afán documentalista con las que nadie se siente identificado y está deseando volver a casa para ver la televisión y "algo con vida".
 La mejor manera de enseñar es creando.

viernes, 13 de junio de 2014

Si Valencia se arruinó para hacerse bella y cosmopolita.... hizo bien

¿Por qué necesitamos belleza si no para superar el trabajo duro y las humillaciones de la vida? ¿las leyes retrógradas y abusivas?,¿ convivir con la eterna soledad,los jefes déspotas,los irresponsables e inmaduros o humillaciones a diestro y siniestro?
Da igual que fuera por envidia o que los que cobraron sobres no acaben en la cárcel aunque deberían. O que fuera el producto del cansancio de un delirio exhausto. Valencia se lo merecía. Merecía poder verse en el Mediterráneo de las ciudades italianas, con sus catedrales de franjas de colores heréticos y compararse en su belleza. A todos esos corruptos sinvergüenzas debemos...gratitud.

Poder ver una imagen de un conjunto de casas y saber que son típicas de Ámsterdam. O los rascacielos requetevistos en las series de televisión y decir "Nueva York" sin nombrarla y no Tokio ni Shanghai. Pensar en los amores pasados con calma o los desaires como un alfiler que te retuerce el corazón es un privilegio de dioses con un pasado. Los escasos dioses con pasado. Eso es un privilegio que muchos se merecen pero que ya Valencia acaba de conseguir.

Recuerdo a Paco Gil comercial  de espaldas anchas de un comercio de iluminaciones que recordaba la Catedral de Valencia cuando revivía alguna humillación que le rumiaba de las muchas que uno tiene que vivir en los contratos mentidos, frustrados y las quejas infinitas de los clientes. Sí, hablaba de la puerta de la Catedral de Valencia  y de su parque como si fuera el mausoleo lleno de materiales que nosotros no podíamos imaginar, lejano de un país oriental.
Como tuvo que pasarse la mili limpiando las escaleras del Edificio de la Delegación del gobierno de rodillas una y otra vez. Paco Gil miraba el plato de comida de chorizo a la sidra y le entraban ganas de llenarse la cuchara y llenarse la boca para remover la comida y no poder hablar más. Y mantener su entusiasmo.
 Aquel hombre embrutecido en el caos del banquete de una primera comunión no hablaba de recuerdos bellos sino de sitios bellos donde había tenido que trabajar e intentado amar.

Lo imagino esperando una cita en la entrada en esquina de la Catedral de Valencia metida en un círculo dando vueltas mirando a la plaza con flores y sintiéndose abrumado por el aroma a naranjos que traspasa.
Es increíble el cariño que tenemos a las imágenes con la gente que conocemos aunque sabemos en el fondo que no valen nada. Mentirnos es fácil lo difícil es poder engañar a nadie sobre la importancia de nuestros sentimientos. Imponer sólo significa hacer tardar la reacción inevitable sólo el vacío lo logra.
Al final yo mismo hice una foto a aquel hombre que parecía un mono renegrido que fumaba el puro entre el dedo anular y el meñique como una sutileza elegante mientras gritaba a borbotones para convencerme de que tenía que casarme con mi pareja. Mientras yo miraba un parque de golf y los barrancos áridos de alrededor podía rememorar perfectamente el aire valenciano tan distinto.
-¿ A ver cómo nos sale? decía retóricamente refiriéndose a mí. Y después de los 10 minutos de tortura volvía a hablar de Valencia de la que llevaba 30 años sin ir. Ya no podría imaginarla tan hermosa cómo es.  ¿ Para qué va uno a soñar algo que ya no puede vivir?.

¿ Cómo pudieron hacer de algo tan hermoso un convento de tapices con la brisa de los naranjos dando la espalda al mar?. Todo muere y se perdona en las Fallas porque muchas veces hay que morir un poco para perdonar y olvidar y no volver a mirar más a lo perdonado. Fa-llas ese arte de lo grotesco,del caos y del humor nacido para abortarlo inmediatamente. Dios bendiga al que llenó de color los trajes folclóricos y el que adaptó al peinado femenino la espiral de la Dama de Elche.

 Merecemos tener recuerdos en la belleza a lo largo de nuestra vida. Da igual que sea en la dictadura de Senegal o en la India de las castas la belleza nos alivia del sufrimiento sin prometernos nada en concreto.¿ Alguien ha maldecido la belleza de verdad porque domine su voluntad? pues que la destruya y lo ingresen en el manicomio. Sobre un vertedero de coches en Dakar las madres coraje hambrientas ven una mole gigante de una madre que levanta en brazos a un bebé ¿ alguien allí se ha quejado de la cruel ironía? Se identifican con el encantador del fakir de la belleza aunque dulcifique su tragedia.

Valencia la más leal de las ciudades diferentes de la periferia.
¿Cuándo la ciudad de las Artes y las Ciencias se llenará de proyectos de empresas y de vida? sólo los brokers alemanes y yankees lo sabrán...  pero el que por fin tenga un sueño tendrá un mausoleo moderno para compartir la muerte de su sueño.  Oh Museo de las Ciencias Príncipe Felipe, cuántos certámenes de científicos para un país grande que no ha tenido ni un Premio Nobel de física o de química. Belleza unido a algo que se regenera y tira para adelante.
Un gran país que restaura sus monumentos y sus leyes retrógradas pero no sus prejuicios sociales. Rodeados de belleza una y otra vez, cuántos décadas costó sufragar el Taj Mahal con miles de hombres trabajando como esclavos, los delirios de Luis II de Baviera que llevaron a la ruina de Baviera y el que se aplaudiera su anexión a la gran Alemania quedarán siempre en la belleza del castillo de Neuschwanstein.
Cuándo un sueño arquitectónico es un desafío que triunfa sólo se puede dar la razón a su belleza, no a pretende significar. ¿Aún podemos cambiar las letras de una música pero cómo renegar de las formas que se repiten en nuestras fotos, que se imponen en nuestra fiebre?.
Belleza : bolsa de plástico con agua que no eres agua y adoptas todas las formas... Valencia...
La familia del niño al que le sangraban las manos
(por supuesto basado en hechos reales)

La  difícil misión de Adolfo era llegar al santuario del Rincón a pesar de la condena. Y sentarse entre
sus compañeros sin llamar demasiado la atención para que no le gritasen ni le insultasen.
Con una ráfaga de aire con olor a barniz se despertó Adolfo en la parada del micro. Llevaba su uniforme gris pulcro que destacaba sobre su bello rostro pálido y sus ojeras.  La madre de Adolfo le había anudado las manos con dos trapos de cocina para que nadie se diera cuenta de que le sangraban las manos.  La sangre le salía de toda la mano como el agua que no aguanta más y por instinto sale de la tierra y lo inunda todo: frutales,papas...
Su casa estaba a 5 minutos del colegio salesiano, su colegio. La madre no quería su sangre llamara la atención sobre el pavimento pegajoso de la acera más que  alguien resbalara. No había riesgo con la cantidad de orina que había. Adolfo había notado que su sangre manaba menos cuando la gente la ignoraba y volvía cuando le daba un éxtasis de sufrimiento. Como si tuviera las manos muy raspadas. De todas formas los pañuelos estaban empapados en sangre y apretados como el resto del uniforme.

-No quiero ir en el micro. Me gritan.Se mofan una y otra vez de mí. Se atrevió por fin a decir extenuado.
-Yo no sé nada. ¿Estás sufrimiento de verdad o te lo haces? Le preguntó haciéndose la víctima e ignorante de todo. Su madre María Luisa era una mujer también alta, bella y muy delgada con las sienes y el gaznate metidos hacia dentro. Cuando se ponía melodramática daba miedo mirarla directamente.
- No, no es nada. Bajó la cabeza de vergüenza. No se quejó más.

Expulsar sangre no le importaba aunque era una gran cantidad como para llenar más de medio balde. Como si se hubiese puesto a raspar sus manos en el asfalto de la carretera. Lo que le importaba era llamar la atención. Que sus compañeros le pusieran otro mote. Y que sus profesores le gritaran, y encima en público. Pero él sabía que tenía una buena excusa para no volver al colegio que tanto le había hecho sufrir. Pero no decía nada para que no le replicaran atormentándole.
Que los hechos hablen por mí. Si sangro mucho alguien me salvará de mi madre. Y dejaré de ir al colegio. Pero no fué así el consejo machacado por su madre fue taxativo:
-¡tú no saludes a nadie,¿me has entendido? lo importante es que no saludes ni respondas ni te relaciones con nadie.

Recordaba a su padre Alfonso que lo había abandonado hace  2 años. Se rió ante el consejo, movía la cabeza de un lado a otro y se mordió los labios con los dientes pero no dijo nada. Le indignaba pero se divertía de lo lindo. El niño de unos 11 años pensó eres un canalla, una de mala bestia... imaginaba a uno de esos negros de las películas que veía como una trituradora destrozaba a su hijo delante suya y se ponía a reírse de pura estupidez y a decirle aunque ya no le oyera:
- ¿te gusta bailar? pues va a ser la última vez que bailes mientras trabajas.

 Con su abandono había firmado su sentencia de muerte sin que le importara lo más mínimo. A veces le llamaba en una pensión de Alcobendas, otra ciudad obrera al norte de Madrid. Embestía sin ver las consecuencias de las cosas...no se podía hablar con él. Si veía que lo iban a corregir se ponía a gritar durante varios minutos y por desgaste ya no había posibilidad de réplica.
-Todos nos hemos acostumbrado a vivir cada uno por su cuenta y así está bien. Si tus manos sangran es que la circulación la tienes bien. Véndala un poco, ya verás que es una chorrada y una cuestión de nervios.
 Y la cosa quedaba ahí.

Pero Adolfito era incapaz de reaccionar, estaba superado por los gritos y la locura. Tenía el rostro como dos piedras mal golpeadas de ver 8 horas diarias la televisión como morfina para la felicidad de sus manos. Le daba angustia cuando volvía a su piso y veía desde las escaleras anchas la puerta recién barnizada de su casa.

Miraba al suelo de la parada que era la entrada al edificio Picasso y se sentaba con la mitad del trasero porque tenía las piernas llenas de cardenales de jugar en el suelo de granito del pasillo de casa sentado toda la tarde. Constantemente había vecinos que entraban y salían, algunos saludaban con las bolsas de la compra y un viejo tiraba una colilla cerca de él por el fastidio de tener a niños desconocidos en el zaguán de su edificio.

Adolfito miraba con asombro sus manos inútiles,reblandecidas y patosas frente a los gritos de sus compañeros más pequeños del micro.
-Chocolate podrido, mierda podrida,mierda podrida...lo repetían una y otra y otra vez.

Estos éxtasis le vienen más a los niños devotos que conocen los misterios de la vida.Pero él veía las chamizos derruidos por el salitre de los pescadores con las redes usadas puestas al sol para evitar que entraran las moscas en los chamizos al otro lado de la calle.Y sólo pensaba en la muerte porque se sentía abandonado como un tiburón resecándose en aquella red hasta llegar la putrefacción...
El micro llegó a las menos 5 sin excusas. Sus dos compañeros Raúl y Echedey el renegrido entraron juntos en el micro destartalado sin saludarle ni fijarse en sus manos vendadas como dos palomas rojas mensajeras muertas.
-¿Qué, a cagarla otra vez?siéntate atrás para que te den otro aullido... le preguntó un gordinflón de la primera fila mientras la seño le viraba de un manotazo la espalda. La seño era una cincuentona muy gruesa de campo, que buscaba que no reinara el caos y el griterío de aquellos salvajes.

El problema de la sangre resaltaba su falta de personalidad para enfrentarse con los gritos de los demás niños. Además era un dineral para una distancia tan corta de 5 minutos andando hasta su colegio. La tarifa era la misma fuera la distancia que fuera. Pero su madre tenía pánico a que el niño saliera solo a su calle.

 La sangre amontonada tenía un color granate. De ahí que pareciera un monstruo de una película de los años ochenta. No tenía a nadie que lo defendiera porque eso sería comprometer a los demás cuando se quedara solo.Y aunque lo había intentando sólo había comprometido a su amigo íntimo Guanhaben que fue el que inventó el mote y luego lo extendió. El propio Guanhaben no quería conocer la gravedad que para Adolfito suponía.

Pegaba a los menores del micro al llegar a la parada en un rincón del patio exterior del colegio. Por puro divertimento con el puño con el brazo en forma de egipcio. Pero sin venganza sino por puro divertimento y por hacer el favor a Adolfito a cambio de que le hiciera los deberes de matemáticas e historia. De todas maneras no era suficiente para calmar el furor de los salvajes.

Guanhaben siente con 11 años. Siente que no va a tener vida ni fuerza para transcribir bien toda su vida. Transcribir como un notario abandonado en la plaza que se pone a hablar con las ancianas que vuelven de la peluquería o de la compra.
- ¿Me quedará mucha vida?. Pero esta de acuerdo conque tiene que ponerse en su lugar, juega con su amigo Alejandro que le garantiza un asiento de madera firme en su micro, el número 1 del colegio. Y un rincón concreto desde hace 3 años para jugar sus partidos de minifútbol.
Guanhaben apenas siente la misión de Adolfo y no le pregunta por sus manos anudadas. Se divierte pegando a los niños menores del patio pequeño anterior al gran patio donde está el santuario. Pero él aunque es creyente no entiende el sufrimiento y aunque no acepta réplicas no entiende el sentido profundo de la religión sin nombre.

                                 *                    *                    *

 Javier Adolfo entra a las tiendas donde apenas le cogen su curriculum adornado. Su misión es conseguir trabajo. Las chicas de la tienda de móviles le miraron entre ellas con cara de asco y cuando se iba oyó  a una que le dijo a la otra:
- ¿Dios, cómo se puede ser así?

 Pero en primer lugar conseguir dinero e intentar recuperar las propiedades que le han robado a su madre. Cuando ve la nevera vieja vacía le da asco el sufrimiento de Adolfo y que no se esfuerce más por ocultarlo. Ni que no se defienda cuando le insulten ni que tenga estigmas para poder abrir una barraca en la feria para cobrar el espectáculo. Javier Adolfo tiene el mismo carácter de su hermano esta harto de tantos desprecios en las tiendas pero le disgusta entrar en los bares para quejarse entonces que se da eternamente hablando solo en el parque mientras la gorda Genoveva esta paseando a su perro preocupada porque su perro no come.
Una vez un borracho tras dos días de que saliera de una entrevista en la que preveía que no le habían aceptado le gritó desde la puerta del bar Rialto enfrente de su casa.
- Si me lo hubieses dicho te hubiese entendido.
Y él se respondió ¿y a mí qué me importa que me hubieses entendido?. Desde entonces lo rehuía para no "contagiarse" de la dejadez que irradiaban los parroquianos con su filosofía de barra de bar.

Después de su ronda de trincheras Javier Adolfo va a la parroquia de Santa Teresita para buscar consuelo en el cura nuevo, cuyo nombre ignora. Lo llama don Manuel como el anterior por orden de su madre aunque sabe que el don sobra por su catadura. Es una parroquia de barrio sufragada por un empresario que sólo pidió a cambio que lo enterraran en el altar mayor sin que le peinaran el pelo.

El cura en cuanto lo ve frunce el ceño y aprieta los labios. Le hace esperar por estar parloteando al final de unas charlas con las catequistas media hora en unas sillas plegables. Mientras él se ríe con su risa nerviosa nerviosa de niño grande. Lo recibe en un cuarto amplio amarillo oscuro del sótano con poca ventilación. A través de unos ventanucos se ven los piés de las personas aplastando colillas en la acera. En cuanto se sienta le dice:
- Dile a tu abogado que no me llame más. Que no tiene ni idea. Una declaración escrita vale tanto o más como una verbal. Yo también soy abogado ¿sabes?.
- Yo venía a hablar de la historia de Honorio y san Pablo que se llamaban hermanos y no lo entendió. Y de algunos detalles confusos de la historia de Noé.
- Tú no entiendes nada. Tendrías que estudiar teología. La historia de Noé es un paralelismo con la historia de la Iglesia: un barco a la deriva...es muy complicado.

Detrás está la mujer de Marcos López Barreto que interrumpe de remplón. Es una vieja pequeña y arrugada con el pelo corto lleno de rizos. Con gesto borde y muy circunspecto prorrumpió confianzudamente sin saludar:
-¡Has cambiado!.
- a lo mejor ha cambiado usted y por eso me ve diferente.
-¡No! ¡has cambiado tú!¡ yo no!

Roberto Adolfo se quedó estupefacto y empequeñecido. Era una maldición el que siempre tuviera que necesitar a personajes así. El cura miraba sin querer participar en el asunto. Roberto Adolfo lo miró pero no quiso pedir su ayuda porque no se la daría. Diría la mujer de Marcos López Barreto es una buena mujer y colabora mucho con la iglesia además que va a ser testigo de tu madre sin tener por qué. Por tanto aunque sabía lo que significaba todo aquello no quiso defenderse de la mirada de odio de aquella mujercita que no quería mirarle.

jueves, 12 de junio de 2014

Los 50 céntimos de deuda de la cueva de Altamira en el 15.000 años antes de Cristo

En la cueva de Altamira no se autorretrató  ni un solo pintor de los que de rodillas revivían contra la roca el vértigo de la caza del búfalo. ¿Quiénes fueron los magos sin secretos del sortilegio?
La cueva de Altamira parece el graphitti en una época de lucidez de un loco, con hambre o entusiasmo por cazar. ¿ Nadie se sorprende de un momento de lucidez de un loco primitivo que no pudo entender la naturaleza? ¿ Cómo es posible que al ver un búfalo de casi 1, 90 de altura en vez de querer reflejar su enormidad quisieron reflejar su color, su fuerza, su volumen al respirar o sea su vida es esto propio de un ser primitivo?
 Los cazadores están peleándose entre sí para quedarse antes con la pieza y ayudándose para matarla. Parecen dos borrachos tirados en los bancos de un parque que se dan trompadas con la cara a un lado y a otro, porque uno le debía al otro 50 céntimos y de pronto paran,se ponen a saltar coordinados porque ven a un incauto desde lejos con cara de niño gilipuertas al que pueden sablear 15 euros,o sea un búfalo,el búfalo.     Al final va a ser que hasta los seres primitivos tienen espíritu.


 Las pinturas están metidas en una cueva y uno si entra de casualidad está obligado a tomárselas más en serio que si estuviera en un museo. Aún hay  algo de luz a lo lejos y como se sabe en su época estaban más cerca del mar del par de kilómetros de los que están actualmente.
Es el movimiento, la fuerza, el volumen y el constraste por los bultos de la piedra de los animales lo que persiguen no su descripción. Quieren ver sus músculos mientras respiran, cómo se mueven cuando reaccionan a las lanzas y en posiciones apretadas aquí aún no hay Dios, ni hay identificación con el animal. Todas esas perversiones de la civilización vendrían mucho, mucho después.
En arte uno recuerda esa intensidad de remarcar sentimientos por primera vez casi en el arte paleocristiano y no precisamente sanos ni de potencia sino de vergüenza, humildad, mansedumbre dolorida. Aquí hay una tradición de miles de años de un sentimiento de entusiasmo.

     Aunque destacan el óxido de los búfalos europeos son los ciervos y las cabras en las que casi nadie se fija los que más abundan. Es increíble como han usado todas las artimañas artísticas posibles sin estudiarlas: hicieron simples rayones aprovechando las grietas. Usaron piedra seca y algo porosa donde se conserva mejor el dibujo.
Aprovecharon los bultos de las piedras para dar relieve a los dibujos pintados con una fuerza desmedida teniendo menos respeto que algún expresionista suicida alemán por "abusar"de los sentimientos confusos y el impacto del contraste y el volumen de los búfalos.
Durante siglos y siglos las grandes civilizaciones tuvieron más respeto por la falsa perspectiva donde el tamaño de cada personaje revela su importancia social que su importancia sentimental.

En Altamira todo es arte, sensaciones y realismo de la caza. ¿ A base de variaciones de búfalos no han conseguido los aborígenes dar sensación de vértigo y confusión cómo lo tendría su caza? No han abusado de todos los escasos medios que tenían buscando una extraña trascendencia a todo aunque miren a sus animales sin respeto. Sólo la civilización separa en efectos abusivos o de mal gusto y los efectos depurados. Sólo hay efectos y una mente humana que siente.

 A veces no son más que filamentos y lineas kafkianas que expresan entusiasmo de vida, concentración para prever cómo reaccionara el animal o alegría de vivir y cazar dando tumbos. ¿Es la muerte de la conciencia de un protagonista que se ha separado por fin de los demás? El hombre sólo es sensación y vista apenas aparece, tiene su sitio pero se deja al margen de la foto a la que da un sentido oculto. A la que pone potencia.

Me encanta la gente que trabaja duro sin esperar agradecimiento sin recompensa.
No las madres coraje manupuladoras, sino las madres coraje que enseñan a sus hijos a ser independientes y asumir responsabilidades y a ligar y a vivir. Y a los recogepelotas de los clubs de fútbol olvidados que están 50 años recogiendo balones y un día se jubilan. Y los jugadores estrellas un día se dan cuenta que ellos tienen que cansarse para ir también a buscar los balones que tiran lejos por hacer la gracia. Y entonces miran al horizonte y echan de menos a aquel desconocido sin nombre.

El artista de Atapuerca ni siquiera sería el hechicero ni el jefe del grupo sino un artesano más, aunque su obra perduraría más y no tenía una utilidad evidente sino la magia contundente de la pintura. Hizo suya la piedra con el color e hizo sentir  siglos después que había que mantener aquellas figuras. Que había que mantener el vértigo de la caza. Que los búfalos tenían que seguir corriendo en aquellas cuevas. No se quiso representar la realidad sino los sentimientos de la caza de forma instintiva. Se acordó mejor de los animales que de los héroes cazadores y ni siquiera representó a un solo pintor de aquellas proezas.

miércoles, 11 de junio de 2014

La mujer que miraba la autopista (por supuesto basado en hechos reales)

No le importaba un carajo que su padre hubiese muerto atragantado por culpa de su cuñado Germán que no cortaba los trozos de chorizo pequeños para que su padre pudiera comerlos. Y le fastidiaba mucho tener que ir al velatorio para verlo. Con 30 años y sin haber acabado la carrera de audiovisuales que para colmo apenas tenía salidas profesionales no quería encontrarse con ingenieros de todas las ramas.Ser agradable con ancianas, amigas de la familia, a las que no conocía .Sólo quería un trabajo y que la amaran sin tonterías.
- Sé que sientes mucho la muerte de tu padre. No sufras.

Y su cuñado se restregaba sobre su cintura y sobre su espalda ante su asco. A Mercedes Álvarez le pareció acoso pero no quiso armar una bronca en aquel momento porque sentía que nadie la entendía. Desde la Garita un pueblucho costero de grandes casas se fué a la Universidad Complutense de Madrid. Y se chifló. Ahora que volvía a la islita de mierda con poca vida social entendía el embrujo de Madrid que le había hecho caer en demasiados amores de cafetería de universidad y de bares a última hora. No se arrepentía de ninguno, de nada. Veía aquel ambiente turbio de discoteca como la auténtica vida de diversión frente a una vida de contenido de trabajo que no llegaba. Pero veía a sus amigas algunas con hijos y hubiese preferido otra cosa.
Ahora lo veía claro con nervios y con ganas de llorar mientras miraba los coches con un destino por la autopista rodeada de tierra árida. Porque Mercedes Álvarez sentía que volvía a tener ganas de llorar por motivos auténticos. Nada que ver con la estupidez de su padre aunque lamentaba que el mala bestia de su padre hubiese muerto.
- ¿ Te has quedado satisfecho, no?

Le respondió por Facebook en la cuenta de un taller de radio a Javier Almagro cuando esté se defendió de sus críticas por el what´s up sin nombrarla .
 -Me sentí como si me hubiesen gritado en la cara en plena calle.

 Mercedes había estado enamorada de este muchacho oscuro al que no le gustaba dar explicaciones. Se sabía que no trabajaba y que tampoco había terminado derecho que había dejado en 4º de carrera.
¿ Qué tipo de persona no acaba una carrera y la deja en 4º a un año de mierda de la meta, Dios?
Pero se notaba que Javier manejaba dinero y tenía un buen piso propio. Lo necesario para dejar de ser una niña que tiene que vivir en casa de los padres. Canarias era chabacana y era imposible elevarla, cualquiera lo daba por hecho pero este chico tenía suficientes delirios de grandeza para embarcar a los demás en el caos y la destrucción.
Mercedes era rellenita y rubiosa,tenía carnalidad y hablaba con lentitud como si hubiese acabado de salir de una hibernación. Conservaba la templanza de un cuerpo compacto. Y tenía un sentido común campechano.

-Yo soy un espíritu libre. Repitió en voz alta mirando a los aviones que cruzaban por la autopista que había sido el fenómeno atmosférico más impresionante que había visto en su vida. Mercedes sabía que esa frase había marcado toda la relación.
¿A dónde irán esos aviones?¿a Londres, Frankfurt, Stockholm?
 Sí, era cierto pero no tuvo que decirlo tan pronto, quizá. Tuvo que tenerlo un poco más enganchado por ella. El hecho es que ella tenía una relación complicada con Rayco. Y al llegar Javier que no hacía más que recordarle el talento que tenía, sintió que la valoraban.
Dejó de besarse con Rayco delante de Javier pero aquella frase lo había enturbiado todo.Había enseñado sus cartas demasiado pronto y ahora lo lamentaba. La dijo cuando uno de los amigos de Javier, no el mismo Javier que tenía coche: un opel astra, la llevó a su casa que estaba a 15 kilómetros. Estaba tan cómoda con la cortesía que quiso ir a tomar unas copas de camino con ellos. Al fin y al cabo al día siguiente no tenía que ir a trabajar y cuando estaban de nuevo en el coche la soltó.
- Aquella frase era como decir "me he acostado con muchos hombres y soy una bohemia". Y a muchos hombres no les gusta oír eso. Lo peor es que dejé a Rayco, sí no lo aguantaba más.Cuando le preguntaban sobre mí decía que era "una amiga". ¿Qué eso de "una amiga"?
Quizá te aburren los hombres que no saben lo que quieren. O a los blandos o inmaduros.

Germán veía a Mercedes a ir de acá para allá restregándose las manos, sus finas manos, sin ver el cadáver de su padre pero no quiso presionarla. Era más delicada que él. Era una pijotera. No había tenido que luchar por su vida en ningún momento. Y se la echaba de mártir por el carácter del viejo. Apretaba la madera agrietada del balcón indiano con fuerza. Germán era delgado y renegrido. Había envejecido prematuramente por su trabajo en los andamios y en las tomateras y no conocía otra cosa ni podía creer que existiera algo mejor que aquel clima que echaba calor de su cuerpo requemado.
Miraba el cadáver amoratado del viejo que había muerto entre sus brazos mientras le había apretado el pecho mientras intentaba que tosiera y expulsara el trozo de chorizo y se murió entre sus brazos. Como un cerdo en una matanza. Y se sonreía sólo de pensarlo.
-¡qué cosas tiene la vida! sabía más gritar que tragarse...las cosas.

Germán le echó las culpas de los moratones que había visto el médico forense que tenía su padre a Mercedes,por agarrarlo demasiado cuando lo sacaba a pasear por el camino de arena y picón del Parque de san Juan en vez de por el alquitranado.Había que tirar de él.

Mercedes odiaba Canarias con un rechinar de dientes, odiaba a su padre, odiaba a Germán. Esa mediocridad de enormes casas de colores con azoteas con ropa colgada no era su mundo. Veía los árboles moverse como un columpio por el viento y las hojas blancas de tanto sol y recordaba las peleas de los vecinos por robarse lindes. No le apetecía ese mundo aunque saliera rica, ¿pero había la posibilidad real de otro?¡No!.¿ con qué dinero,dónde?.

Mercedes miraba a Germán desde la ventana donde estaban sus sueños. Mientras ella estaba lejos su hermana Inma superada por la necesidad de cuidar a su padre abandonado aceptó a este tipo que sólo tenía una camioneta destartalada. Primero salieron dos años y aunque no le gustaba le daba seguridad. Solían salir a los bares y él siempre se quejaba a los camareros de que la comida estaba congelada del día anterior. Se formaba una pelea y él amenazaba con llamar a la policía con lo que los camareros se arredraban y bajaban el precio. Admitiendo que era una costumbre tácita. Después ella cortó para saber si podría conseguir algo mejor y si él le sería fiel. Después de un año Inma no consiguió nada mejor salvo niñatos de 25 años que sólo pensaban en divertirse y acostarse con turistas y él consiguió una barriobajera con la que consolarse. En cuánto volvieron a encontrarse en una obra cerca de su casa surgió otra vez la necesidad del amor.

 Germán era un tipejo 32 años mayor que ella que sabía cómo funcionan las relaciones y que tenían propiedades en el pueblo, con sus estanques, sus acequias y sus servidumbres. Las había vivido durante décadas mientras había visto cómo se levantaban los muros de cemento con una especie de gotelé en las tomateras abandonadas. Sus hermanos se habían criado en las cajas de tomates de los dueños bajo el sol. Ahora él estaba emparejado con una hija de aquellos patrones déspotas y cabrones que le habían hecho encallecerse las manos y arrugarse el rostro en los mediodías donde casca el sol.

Mercedes vestía unas botas militares tachonadas, una falda de bailarina y una blusa rosa con un pañuelo palestino. Todo un recuerdo exagerado de Madrid que nadie tomaría como elegante en Madrid ni en Barcelona. Nadiuska soñaba con volver, cuando una ha sentido la libertad,las fiestas de verdad hasta las 10 de la mañana, los conciertos de rock todos los días volverse a comprimir a un moco cuesta bastante.

Miraba el cadáver amoratado de su padre con un pañuelo atado del craneo a la mandíbula. Le dió un repelús y viró la cara. Conservaba ese rictus de la persona que te clava la miraba y tiene como una férula metida dentro de la boca, como si apretara la dentadura de rabia y odio.
 Después volvió a mirar y sonreía. El ataúd era de madera pálida en medio del único salón principal. El velatorio se hizo en casa por una promesa del fallecido que no quería el tanatorio que tenía forma de pirámide.Y el suelo era de granito pobre como el de una perrera.
- Con mi cadáver hagan lo que quieran como si quieren tirarlo a un barranco.Me da igual. Recordaba.
-Vaya pedazo de cabrón. Qué cabrón, cabrón,cabrón. Tenía angustia de subir esas escaleras de volver a casa para que me insultara. Para aguantar sus regañinas. Dios qué bien que este muerto. Lo siento, lo siento, pero qué bien.

Al final el velatorio se hizo en el chamizo de Inma a pesar del disgusto de Inma porque era grande y más céntrico y se podía llegar a él sin tener que pasar por el camino de tierra.

A Mercedes no le gustaba nada de mal gusto y tenía memoria para rescatar afrentas del mal gusto. Ahora que había salido la nueva Ley del Aborto, una ley retrógrada que retrocedía en 30 años los derechos ganados sobre el aborto. En la radio querían fingir una entrevista a una mujer que quisiera abortar por malformación del feto, eso no sólo lo negó de tajo sino guardó un profundo rencor a quien lo propuso. Y siempre lo comentaba cuando alguien le preguntaba sobre esa persona .

Estaba en una noche de marcha sin ambiente en el Puerto y se había enterado unas horas tarde de la muerte de su padre porque tenía el móvil en silencio.
Últimamente había tenido que tomar antidepresivos y no sabía si le habían crecido los pechos por eso.Se los miraba asombrada mientras veía llegar a las viejas, amigas de la familia que no la reconocían y que no le daban el sentido pésame.
Habían unas sillas plegables de madera y ella estaba sentada la última en la fila donde se daba el pésame . Cada persona que no la reconocía y no la saludaba era como un bofetón fuerte en la cara que le dieran para superar la resaca. Algún día yo seré protagonista de mi pésame. Y yo diré que he sido la que más he sufrido este pésame. Y echaba un suspiro pasivo mientras miraba ya sin odio a Germán que parloteaba sobre el Mundial de fútbol a lo lejos del cuarto.
Ay cuánto me gustaría estar lejos de aquí, huir de estos mundos de Yuppi. Miraba a través de la ventana como se iban los coches sin saber a dónde. Mercedes sabía que esta tierra era una luna abrasada de sol. Sin historia, llena de gente.

Mercedes volvió a suspirar mientras estrujaba un paño para acolchar el agua en la gomaespuma de un florero con flores. No tenía a nadie pero era libre, liiiiibreeee.
Y sonrió de satisfacción mientras miraba el "joven" cadáver amoratado de su padre.

martes, 10 de junio de 2014

Cuando una estafa es una bendición

Muchas veces voy en coche desde el Sabinal para dejar a mi chica en el trabajo. Cojo una cuesta imposible en segunda marcha por el Lomo Sabinal. Atravieso un itsmo  en las alturas entre dos barrancos  donde se ven 30 kilómetros de costa hasta casa del padre de mi amigo Godofred.
   A su padre se me olvida saludarle con el apretón de manos porque siempre me está dando la tabarra que vaya a Fuerteventura a alojarme a su casa. Por supuesto que no dice que es para que esté trabajando 15 días en su reforma por nada. A veces le he ofrecido un cambio: 15 días de  mi trabajo si él me valla mi finca que es cosa de 1 semana.Pero él ni se plantea el cambio, o sea trabajar gratis para otro  . Es trabajar allí a cambio del hospedaje ni siquiera de la comida aunque algún día me invitará a algo para que para colmo yo le dé las gracias. Si estuviera solo seguro que me aventuraría en el proyecto absurdo esperando conocer bellas chicas o hacer una gran casa. Cosas improbables.
   Es un abuso y más viniendo del padre de un amigo pero lo que me alegra es que confíe en mí. Por supuesto sé por experiencia que el trabajo gratis no produce gratitud.
-Es muy poco trabajo y el tiempo libre estaríamos todo el tiempo pescando...en bici...

Saber que alguien confía en ti para hacer un trabajo duro es ya una alegría oculta.

Pero el que da órdenes considera que es natural que te obedezcan. Lo mimas para que te grite.
 Sé por el cuerpo cansado al atardecer cuando trabajé de práctica para mi tío Aurelio Rodríguez en Valdenuño dos semanas de Navidad y para Mapfre mes y medio que no se produce gratitud ninguna. A veces te dan de comer si les miras con pena o con insolencia y encima tienes que darles las gracias. Caminar desnudo por las playas de Fuerteventura bajo la brisa tampoco compensa.

El trabajo tiene que hacerse valer una y otra vez.En nuestros barrios por alguna maldición de una joven pelirroja muerta de dolor por un desengaño amoroso se hacen sangrías con los árboles.
Lo lógico sería eliminar los chupones las ramas que nacen en vertical con más fuerza de las ramas horizontales para que no se enmarañen y el árbol tire para arriba y se abra para los lados.   Sin embargo se cortan todas las ramas indiscriminadamente echando silicona para que les sequen las lágrimas. Resultado tarda una buena temporada en recuperarse y en cuanto crece se vuelve a enmarañar.
Los jardineros jóvenes saben que lo hacen mal y cuando les preguntan por qué lo hacen responden señalando al capataz con la barbilla. Odiándote  porque les puedes crear problemas. Así los biólogos y los jardineros salen de la Escuela aprendiendo que hay cosas absurdas y se las obligan a hacer en su trabajo. Su trabajo sirve para algo: ganar dinero... entonces eres un jardinero profesional.

El Colegio de Abogados regula el comportamiento de muchos abogados.O sea su hechizo de palabras: su trabajo.
 Un abogado es un paranoico de su prestigio, de su porte porque no sólo quiere cobrar sus servicios sino también cualquier consulta. Aunque la consulta con una respuesta generosa le lleve a tener más servicios.
Me sorprende cuando el abogado en la emisora de radio no quiere dar ningún consejo sobre un acoso laboral o sobre un abuso porque esta perdiendo la posibilidad de cobrar una consulta.
- Pero la gente sabe lo que es acoso, lo que no saben es ¿qué pueden reivindicar?¿qué derechos tienen sobre todo cuando sus contratos son de interinos o eventuales? ¿entonces todo vale?

Me encanta la mentalidad cuando una compañía de seguros niega la cobertura legal a un asociado y comenta
- Es que ha quedado mal aunque después pague ese servicio.Porque lo estás pagando en el seguro...

El trabajo tiene que hacerse valer aunque sea por arrebatos de dignidad. Tengo una amiga que se niega ir de vacaciones a ningún país musulmán para no tener que ponerse un pañuelo sobre la cabeza. A ella le es indiferente  que en España para entrar en una Iglesia hasta hace 60 años hubiese que ponérselo.Ni se lo plantea. Las pirámides de Egipto y las Mezquitas de Turquía y ella serán felices sin haberse conocido nunca.
Y yo seré feliz de que nadie me grite para trabajar más duro por un trabajo por el que no cobro.

domingo, 8 de junio de 2014

Hitler nunca vió sus campos ni la troika sus barrios del sur


Hitler nunca vió sus campos de concentración

Hay mucha gente cansada de mundos perfectos cuando no hay obras qué hacer.
¿Hay algo más hermoso qué cuando alguien por deber deontológico tiene que destrozar la vida de la gente pero no quiere ver las casas herrumbrosas, los barrios con edificios de bloques pelados y con socavones en las calles,los parques abandonados y personas que trapichean en la calle sin futuro, o sea las consecuencias de sus diagnósticos?.Un fallo de cálculo y miles de vidas se salvarán...o no.  
La troika asumida no ha visto la miseria que genera en España. Salió corriendo de Madrid tras apretarnos las tuercas porque tenía muchas cosas urgentes que hacer. Es increíble que un economista pueda aceptar el chantaje de intereses abusivos pero no quiera vivir los recortes que tanto jalea. Hay mucha personalidad para asumir los pactos  abusivos hechos. Aquí ya hay ideología: el sano sálvese quién pueda... y maldad con el sufrimiento humano.
Nosotros recordamos a Hitler por sus campos de concentración que iban a dar a luz un nuevo mundo. La troika no verá cientos de barrios en los alrededores de las grandes ciudades donde la gente va a recoger comida en los centros de alimentos. Muchos empresarios merodean las instituciones públicas para conseguir ayudas para ofrecer productos que pocos querrán comprar. La gente cada vez más prefiere productos baratos y malos casi por cuestión de conciencia aunque sea ineficiente a la larga.

Lo curioso es que se desecha del sistema productivo a gente muy dispuesta a incluirse en él de cualquier manera. Pero se acepta el crédito en las condiciones abusivas que impone el mercado. Se crean guetos donde es difícil prosperar. Y todo para defender algo tan alejado de la realidad como la depuración...de la deuda¿ Cómo es posible que las condiciones tan duras de la economía la impongan tan pocos de forma tan difusa?.
















Manifestación contra el petróleo para aprender a besar en la boca. 7-6-2014

Después de tantas muertes sin memoria de pescadores quién diría que las patrulleras volverían a gritar por el megáfono del banco canario-sahariano por el petróleo.   Y rodeados de petróleo y de potasio tenemos que dar sablazos para conseguir gasolina y llamamos a nuestra fruta ecológica, por no pagar fertilizantes.

El bosque de Birnam lleno de banderas ondeando como gaviotas, de más de unas 200.000 personas según los convocantes,claro, se nos echa encima con una sensualidad sin precedentes.
 Después de 40  años de quejas porque no diferencian la pota que venden más cara como calamar sahariano se vuelve a reivindicar el Banco canario-sahariano. Todos los convocantes tenían derecho a una alegría una vez al año, a ver jóvenes exagerando sus críticas, silbando sus ritmos y atribuir como sus jóvenes discípulos a los que ondeaban banderas hasta un lejano horizonte.
 A salir de sus catacumbas asfixiantes y estrechas y a participar en una manifestación multitudinaria: los republicanos, los independentistas canarios, los comunistas, EQUO, PODEMOS y cualquier asociación con altavoz o chácaras para bailar al son de los cencerros de las cabras. Gracias a Dios la gente con la sensualidad del aroma a arena iba de negro porque la sensualidad canaria hace que ni nosotros podamos tomarnos en serio aunque sea un homenaje contra las prospecciones.

Una jovencita contundente movía las caderas con un perro dalmata  enorme. La llevaba como un remo que le hiciera temblar los brazos mientras escupía con un gesto de orgullo, lapos al suelo. Para demostrar que en esta tierra se fomenta la igualdad entre hombres y mujeres. (A no ser que sean mujeres saharauis entonces se fomenta el mantenimiento de tradiciones endémicas)...

 Cuando sobrevuela el helicóptero de la policía nacional bastantes manifestantes de la riada les hacen cortes de manga y las jovencitas saludan en su desfile de concurso de belleza. Falta mala leche pero mucha, para hacer una manifestación como ésta...
 Una manifestación  en San Telmo como un embarque para la guerra triunfa cuando uno siente que ese arrebato ni el canto de los pajarillos de los ficus ni tres patrullas de policía con una orden de última hora pueden pararla. Uno busca a personas que saludar que  subidos en la
 guagua o en alguna de las esperas con ticket de la vida no saludaría. Los adolescentes inmaduros se llenan de la necesaria soberbia para besar a la chica a la que cogen de la mano cuando "otro hombre" adulto la mira concentrado con una sonrisilla.
Una cosa extraña de esta procesión política prematura es su olor a arena de los cuerpos de su ambiente festivo, y la manía de "divertirse" bebiendo litronas aguadas de cerveza propias de aquí, que podrían servir para sustituir el agua con lejía para diluir la orina de perro. La batucada adquirida en estos certámenes folclóricos de San Telmo quita cualquier aspecto amenazante a la manifestación.
Porque hasta Martin Luther King necesitaba presionar dejando en evidencia a sus "protectores" para que le tomarán en serio.
Ha sido bueno hacer la manifestación en una calle de dos carriles con sensación de estrechez pero donde se pueda sentir el sol y la opinión de los vecinos.
La bandera contra las prospecciones petrolíferas es la bandera independentista. Sus líderes les da igual protagonizar una batalla perdida con tal de quedar en el imaginario colectivo como idealistas.

Desde las vidrieras de los bares los agobiados se vuelven a hallar a salvos en tierra libre. Recrean sus historias a los camareros que las contarán de guarnición a los clientes de menús durante la semana.


¡Soria atiende
Canarias no se vende.
Lo tenemos claro
tú lo tienes crudo!.

Esto no suena a una maldición con dolor ni una amenaza de muerte.
Una voz de niña morenita a través del altavoz da sus chiflidos adorables:
- métanse dentro de la plaza y en la calle contigüa . Dejen paso que somos muchos.

 Recordaba con satisfacción lo que le decía una voz adulta al oído que también se escuchaba por el altavoz.  La voz de la niñita enamora inmediatamente y me recuerda las lecturas de la Biblia que uno hacía antes de la primera comunión por obligación y después por orgullo.

Sólo la furia y el frenesí de los cuerpos bailando una cabalgata del carnaval puede dar una sensación de lo que es una manifestación aquí. La luz potente excita el movimiento de los cuerpos de color tierra. No hay tensión revolucionaria europea y los gritos e insultos producen disgusto con permisividad en la muchedumbre que ponen gesto de "lo que hay que oír,bueno"...
El que tiene un micrófono lo presta para quien quiera hablar. Este no es el espíritu asambleario de Madrid donde hablan 3, porque puede hablar todo el mundo cuando las personas están cansadas frente a la Puerta del Sol...

Mientras esta Cabalgata de sensualidad  reivindicativa de rencor frustrado triunfaba en las calles, Enfrente en el puerto, REPSOL, nos restregaba cómo colocaban sus Plataformas petrolíferas.


Cuando acabó la manifestación los jóvenes volvían a casa tras salir del bar bailando al ritmo de las chácaras y rememorando al tropezarse con sus pasos. Tarareando de mala manera los versos chuscos de la reivindicación frente a la plataforma que sigue en el puerto. Y protegida con el mayor dispositivo de seguridad de última generación: la indiferencia asumida de la gente de los bellos edificios de la Avenida Marítima.
Esta es la primera manifestación que ha triunfado porque no hay choque de intereses entre tantas personas de índole dispersa, lo que ha sido una torpeza de la derecha política.
Después de la última manifestación hará unos 9 años contra la ley universitaria que acabó con una embestida de la policía nacional contra adolescentes, nadie cree mucho en el resultado de estas manifestaciones. Yo pasaba por ahí sin recibir ningún bandazo mientras daban porrazos a mujeres en estado de gestación.
Los parados pasan de ir a las manifestaciones en defensa de los funcionarios a los que según éstos tanto deben.
En esta Crisis no sólo cada país va a lo suyo sino cada sector va a lo suyo con crear un desinterés sólo irán los suyos a lo suyito. REPSOL ha garantizado que de su petróleo no va a salir ningún euro al pueblo al que expolian. Pero de buen rollo que si hay que tirar un poco de aceite nos lo pueden regalar en nuestras costas para hacer pulpito en su tinta.
Hasta en los encierros hay más infraestructura: se tunean los coches, se les estirpa el motor unos a otros,se cierran y reabren carreteras sobre la marcha. Y nadie necesita reivindicarse con eslóganes de cartón.
En Lanzarote donde la desaladora da el agua para bañarse hay pánico que en una limpieza de la plataforma lleguen restos de petróleo y estropee una desaladora que es necesaria en la vida cotidiana.
Los expertos se llevan las manos a la cabeza en el momento oportuno que la cámara les enfoca diciendo académicamente que las probabilidades de derrame son minúsculas. Que en la historia eso ha ocurrido ocasionalmente y que incluso el protocolo de seuridad es muy estricto. ¿ Los espectadores se preguntan quién le paga? ¿Acaso no ha habido buques de petróleo dirigidos por capitanes alcoholizados que durante años han ignorado los protócolos?. Personajes que al final no fueron a la cárcel y que se queja de que su empresa les obligaba a dar mayor rapidez y productividad a su cometido.
Sí 77.000 toneladas de hilos como de plástico cómo diría Rajoy ministro del ramo, que tras la catástrofe que empezó en Galicia y  llegó hasta Francia,  acabó siendo líder del Partido Popular y luego presidente del Gobierno. Así se depuran responsabilidades.



No me extraña que el único presidente del Gobierno canario fuera un tipo que hacía llamamientos al acuerdo y la paz al enemigo en plena Guerra Civil para hundir más a los suyos con la visión de la derrota.


Los helicópteros de la policía y las estrellas de banderas independentistas nos vigilaban desde el cielo.
Allí estaba Yeray Rodríguez el presentador gordinflón,irremediablemente campechanote y chistoso del programa folclórico Tenderete sobre una furgoneta gigante arengando a las masas. Y Diego el vegano, la última vez que lo vi fué cuando Juan Ferrer lo echó de una clase de oratoria por querer amenazar al obispo. Tardó en darse por aludido y el confereciante dijo que no seguiría hasta que se marchara y tardó 5 minutos en un silencio molesto.
Yo estaba arrastrando en un paseo a Raúl por las librerías de Triana, y él  se reía del gusto de las ancianas. Raúl el último romano que tengo para estas rondas. Le llamó su hermana Raquel desde Fuerteventura diciéndole a gritos:
-¿ por qué no le estás tirando los tejos a una chica? siempre estás con hombres

Ni siquiera me ofendí, sino que le propuse ir a la manifestación de la que se aburrió pronto. Me alegré por el buen rollo de la familia que siempre le estaba recordando sus obligaciones a mi amigo. Mi familia tenía  gradación en todas sus anormalidades pero veía las casas con azoteas viendo pasar los coches en la autopista y no sentía en ella para nada tan buen rollo.  
Ponerse los cuernos en la Radio Alternativa.

¡Qué tiempos en los que los caprichos snobs de los empresarios del ladrillo parían emisoras de radio para sus hijos y de televisión para sus queridas en Maspalomas!.

En la radio aprende uno a ser persona por la palabra. Como el trabajo duro te  crea carácter de persona adulta.
Hasta hace 50 años la imaginación del mundo y el Dios al que se invocaba de mundos apenas soñados era la radio...¿ qué fué de este Dios, dónde están ahora sus templos, quién lo mato?
Las pantallas. El naturalismo del televisor lo abrasó todo. Hoy día en una semana cualquiera tiene más información visual que nuestros abuelos hace 50 años. Y no sabemos qué significa.

Hay situaciones inverosímiles, imposibles de invocar con conjuros de magia que la técnica promueve y la sociedad desprecia. Hace que negocios enteros tiren comida o materia prima por sistema, como los buffets. O que haya productos tan buenos como las medias irrompibles, que el empresario pida a sus técnicos que saquen al mercado productos obsolescentes de fácil desgaste para que el cliente vuelva a reponer el producto y comprar otro y la industria siga produciendo.

Las bombas atómicas de bolsillo o las emisoras de radio son dos ejemplos. Hay tanto potencial de energía en el Universo radiofónico que el Gobierno tiene que subastar el campo radiofónico. Y la demanda está tan poco diversificada que hasta el pueblo reconducido por sindicatos y movimientos sociales crea las radios comunitarias donde con poco control cualquier persona "socia" puede comunicar lo que desee.
Se reunen cinco mujeres mayores para revivir sus vivencias cuando iban a calar calados infinitos o trajes folclóricos para un programa y acaban hablando como su madre murió de cáncer de piel. Cómo no invitaron a sus primos y demás familiares al velatorio porque le habían dado la espalda a su madre en la agonía, y la rechifla que supuso que los parroquianos del bar de enfrente llenaran el funeral por una ronda antes del partido de la última jornada de liga de fútbol y algo de humanidad.

La democracia directa sin filtros donde opiniones minoritarias pueden expandirse.Por mucha podredumbre que tenga el sistema clientelar y familista de los grandes partidos no hay una corriente humana que haya logrado crear infraestructuras alternativas. Hace falta dinero a fondo perdido y nadie quiere mantenerlo. Las barras de los bares son hermosas como para sustituirlas por sedes políticas.
 Conozco superficialmente a un mafioso ruso del Sur y me parece entrañable la educación y el respeto que siente por la gente que expresa su opinión en los medios alternativos:

-la cultura occidental...comentaba con envidia al aire para que yo le oyera en la terraza de su bungallow. Y después movía la cabeza de un lado al otro con vergüenza como pensando ¿ cómo puede haber gente así sobre la faz de la tierra?

Los medios de comunicación del sistema sólo se fijan en los hechos y no quieren ensuciarse de barro las manos de su prestigio. El prestigio por encima de todo, sólo los irresponsables sin lealtad a nadie,a ningún partido político, que aman la verdad se queman a gusto a lo bonzo ante un micrófono de radio ante la indiferencia del técnico de la cabina caliente y de los profesionales invitados.

Estas emisoras sirven para proclamas que no se leen ni en los tablones de los sindicatos en los comedores de la empresa. A fin de cuentas el trabajador pide soluciones a problemas concretos a los  sindicalistas  o activistas radicales y después de las medidas de presión y de haberles sacado el jugo, como un chicle los escupe. Y los ve como un metefuegos cuando el problema a pelear es de otros.

La radio en los países que no son anglosajones ni Francia implica ser neutro. Una grosería para resaltar el sentido grotesco de algo te arrastra al margen izquierdo de lo que no se expande masivamente. Las ondas en el agua las produce una piedra más y más pequeña.
Por eso hay que ponerse los cuernos y atacar el monasterio del acantilado. Pero radicalizarse sin apoyo económico o político es como venderse en un tienducha del rastro.
O sea que un medio esencialmente democrático no sirve de nada porque a la sociedad no le interesa.

Mabel licenciada lo que quiere es ingresar en el sistema. Que le den un buen trabajo, si es posible público e irse a las 15.00 a su casa. Irse a pasear a a playa con su perro y conseguir un crédito abusivo para reformar la casa que les dejó el padre de su novio. Los delirios de un adolescente pajizo de 28 años en un radio de comunistas ( dicha esta palabra en un tono tenebroso como si fuera una secta satánica ni le interesa lo más remoto).

Una emisora de radio es como un poeta del pliego del cordel pero sin plaza, lo más humilde que hay. Ha sustituido al ciego con una vara y un gran pergamino  rodeado de niños que corrían y de viejos a los que les costaba sentarse, que se ponía en medio de la Plaza, para contar una historia de amor que enfrentaba a alguien de la autoridad contra alguien del pueblo.
 Si es local o de pueblo, es cuestión de Honor del Ayuntamiento que se encargará de dar un buen local abandonado. Será el auténtico portavoz de las actividades culturales y polémicas difundibles del pueblo por tanto se será generoso.

Si es la sensualidad de una emisora de radio comunitaria es algo confuso.Algo que nació en los años ochenta cuando se secuestraban guaguas para celebrar una fiesta en el sindicato. Y eran los sindicatos con líderes machotes con jerseys de cuello alto o camisas sudadas desabrochadas pero con sentido de la Autoridad gobernaban de facto muchas instituciones públicas. Pero había que dar explicaciones y los tablones de anuncios no persuadían como una arenga a grito pelado y con chistes ramplones que soltaban carcajadas de cómic de Mortadelo entre los trabajadores renegridos.

Cómo gritó en un sermón Kiko Argüello hay 3 sitios sagrados: uno es el lugar de trabajo aunque no te paguen por ello.

La sensualidad  caribeña sin aroma de un piso sencillo de renta antigüa haciendo de vigía al mar. Olas de amarillo que llenan los cuartos con cuadros reivindicativos de la Transición renovados para la actualidad y recuerdos de Quintas Psiquiátricas.Y cuando uno saca el cabezón por la ventana: Vegueta un barrio histórico al que aún no ha llegado suficiente dinero para tener monumentos al que atribuirle leyendas llenas de pasión e incoherencias minuciosas. Bohemios estrafalarios que te juran que son amigos ¡pero de los de verdad! y despotrican contra los periódicos locales folclóricos que no les dejan publicar.
El técnico de radio al que le pagan poco por 5 horas de trabajo y está todo el rato enrollándose con una chica en la cabina caliente o llamando por el móvil al mecánico o a algún amigo para sablearle a grito pelado.
Los profesionales que vienen a darse bombo y a los que les importa un carajo el programa. Y que son incapaces de no apoyar la cabeza en las manos o escribir cosas por el móvil,o hacer cualquier gesto de un desinterés maleducado hacia el trabajo del locutor...

A Radio Guiniguada siempre le ha faltado un cadáver pudriéndose, amoratado y con un mordisco en la bañera con el cordón de Seguridad y una amenaza por escrito de la policía y del delegado del Gobierno, en la cabina de sonido y en lo alto del de los micrófonos para recordar que hacemos algo importante. Aunque no le importe a la chiquillería de las manifestaciones masivas que promueve.

Las bombas atómicas de la radio

¿ Qué historias del pueblo puede comprarte el pueblo sin compromiso? La comunicación es el único producto que se regala y se rechaza constantemente.
Las mujeres rubias, hermosas y contundentes van a buscar trabajo en los estudios de cine o en los pasillos de las emisoras de televisión, no en la radio. Sin embargo en la radio uno esta desnudo y mide lo que tiene interés. Quien domina la radio apenas va a desntonar en otros medios de comunicación incluso aunque hable poco, aunque tropiece a pesar de sí mismo.

Las emisoras de radio que nacieron en los ochenta en el mundo sindical hoy lo usan los emigrantes para comunicarse en grupo con sus familiares en los países de origen. Pero lo inmediato al no estar elaborado no se valora. No tiene la depuración artística.
Cuando uno consigue un medio de comunicación sea el que sea quiere concentrarse para la creación y luego inmediatamente insuflarlo de vida para poder venderlo.

sábado, 7 de junio de 2014

Gabriel García Márquez era un colgadera
(el cuento que Carlos Álvarez  autor de la Pluma del Arcángel no entendió)

- Déjate de hablar de las"marditas" letras, mamarracho. Cállate, ¡Dios!. A tostar, huevón.

Esas fueron las primeras palabras de sabiduría del maestro desde unas escaleras, mientras bailaba de cualquier manera,ondulando los brazos, que me gritó a medianoche en un bar abarrotado del barrio Chino de Barcelona en esquina con Las Ramblas. Nadie en el bar se paró ante el griterío, que pasó desapercibido.La multitud de devotos lo miró con aire distraído menos un japonés que vivió lo de Hiroshima, que se quedó estupefacto.  Había mucho vaho dentro del bar. El suelo estaba pegajoso y  lleno de servilletas arrugadas de papel. Habíamos ido después de la ceremonia de la final del premio Planeta.
                         
                                                            *                  *                *

 Habíamos ido después de la ceremonia de la final del premio Planeta.
 ¡ Cuánto sufrimiento!¡Qué tortura de lujo y humillación por morbo!¡Y tenía que pasar por el aro para no ser un don nadie! ¡Vivía achantado!  ¡ A veces pensaba qué tantas humillaciones y necesidad se recompensarían de alguna manera! ¡ Pero se ve que no!   Hasta le tuve que pedir un traje a mi tío. Estaba allí delgado sin atreverme a decir nada a los que me rodeaban. Iba con un pulcro traje negro,con pantalones de pitillo, y con mi libro de opiniones sobre filosofía del que sí estaba más orgulloso por si alguien me lo editaba.

- ¿es usted el que se ha pasado estos dos días paseando y tirado en el banco de las barras de madera?
me respondió con desdén el editor cuando le enseñé el libro. No encontré otro momento para lucirme que el velatorio de un escritor que había sido el día anterior al premio.
         
          No hubiese tenido que venir a este premio por dignidad pero tenía que abrirme en este mundo y cuando fuera famoso me necesitarían. No me apetecía escuchar a mis colegas con sus aires de grandeza ni como me corregían mis anécdotas en la islita de 1500 kilómetros de tierra nostálgica de áridos. Había ido a manifestaciones y me había apuntado a sindicatos para que me colocaran. Lo mismo.
         En el salón donde se daría el premio era del mismo Hotel en que nos hospedaban. Tenía un gran salón de entrada con 5 plantas con vistas a las floristerías donde se despertaba la imaginación, y comedor con buffet que era uno de los primeros que había visto.      En mi habitación, en la mesa junto a mi cama estaban aún 7 sobres grandes abiertos con somníferos para anestesiarme y manuscritos para que  los vieran los editores.
   - Sí este es el mejor momento de mi vida.
   
Pedí habitación con teléfono, me asignaron una del cuarto piso. Subí para estirar las piernas por las escaleras y me retiré para cotillear conmigo mismo. Después pedí continuamente a la telefonista, una mujerona mayor de voz lenta y pastosa 4  números de teléfono. Llamé a 3,4 mujeres, por un poco de compañía para comer. Sólo Maraya aquel amor contrariado y retorcido aguantó mi insistencia, pero ella que tanto había despotricado contra mí en público y en privado haciendo que me echarán a perder algunas de mis conferencias, después de tantos años en que hemos podido hacer las paces, tiene una excusa inapelable:

     - Tengo a mi marido enfermo. No, no puedo. No chismorrees demasiado. Me soltó hirientemente después de tantos despotriques que lanzó contra mí.

         Sólo me habían invitado para hacer bulto con 10 novelistas más, que no conocía, en un salón de castillo medieval donde yo era otro bufón intelectual con mesas redondas de los gerifaltes del Régimen que querían culturizarse. Yo con mi primera novela con 35 años encerrado en el infierno de la ratonera de una islita anodina jugaba con las servilletas para pasar desapercibido.
Era una novela absoluta, narrada a través de fragmentos, sin especificar el narrador en un torrente de voz interior. Pero,oh sorpresa, a nadie le importaba. Estaba aquí sonriendo ante el único fotógrafo delgaducho  que se conformó conmigo sujetando su enorme cámara. Y jugando a hacer carambolas con la mirada de las mujeres con vestidos escotados y camareros solemnes de aquí para allá. Decenas de personas con traje y corbata para lo mismo: hacer bulto. Ser un vampiro de sus secretos más íntimos o plantearle nuevas narraciones era idea mía.

 En cuánto llegó Gabo bajando unas largas escaleras decenas de mascotas con su cámara sacadas de la perrera empezaron a hacerle decenas de veces la misma foto. Con un ramo de buganvillas para regalarle a las señoras que quedaron con un gesto de agrado como si fuera el primer joven que las invitaba a paseo en su carruaje.  Llevaba un traje gris de solapa ancha con un bigote mal cuidado, vamos como un cateto caribeño que nos iba a robar la única línea de consolación  que nos dejó aquel premio.  Su imagen era imperceptible ante el fenómeno atmosférico que lo rodeaba pero estaba resabiada de tantas portadas de revista en que había salido . Pero en vez de flirtear con vallenatos a las mujeronas ricas se callaba ante los alegatos de sus académicos admiradores. Se notaba que tenía dominado el arte de contar sus historias de pliego de cordel de forma peculiar como un ciego con su vara en la plaza del villorrio.

Unos matones le habían amenazado ya con el nobel. Él les recordó sorpresivamente a su hermano como si sintiera un extraño remordimiento de dejar la miseria cuando sus libros lluviosos conseguieron rodar los cantos de los lectores.

-¿ Usted cree que  para un tipo que está tirado todo el día en el parque en un banco de piedra rota y rodeado de ahulaga, que sabe que es un desgraciado aunque se preocupe por chorradas, es un orgullo volver a su piso con el ascensor roto y la luz cortada, y subir las escaleras oscuras de 4 pisos para que su mujer llena de nervios le grite llamándole inútil y don nadie?

 Ésa fué la primera vez que vi sus escaleras. Estaba empeñado en que escribiera sobre unas escaleras no para subir ni para bajar ni para caminar de espaldas.Sino para pararse y fingir quedarse en medio por algo. Para que los amigos barceloneses mitificaran este hecho que querían olvidar por el dolor que les causaba. No quiso conocer a ningún catalán sofisticado. Ni quiso conocer los  detalles minuciosos del escándalo de la muerte de Carmen Broto ni las obras de ingeniería del Palau o del Barrio Gótico cuyas leyendas me había inventado con mucho esfuerzo el día anterior para ser coherente.

¡No sirvió de nada, esforzándome encerrado en casa!. Desperdicié mi vida, toda mi vida, día a día desperdiciada toda mi vida!.
Mis años inclinado sobre una mesa como la cerviz de una vaca mientras escuchaba por el balcón la música de los coches yendo hacia la discoteca no habían servido de nada.Viendo la fachada sucia de color del edificio de enfrente.

Gabo estaba taconeando un zapateao sobre una mesa de madera resquebrajada con una canción que había perdido el tono. Se suponía que era un ballenato.  Hacia fuera se veía uno de esos vehículos que te quita la basura de las calles después de que un desfile de la belleza hubiese acabado en una manifestación violenta.El tráfico recobraba la normalidad después de una procesión a una Virgen con la consecuente manifestación de protesta.Vimos contenedores tirados e incendiados sin llamaradas de guerra. Personas bien vestidas corriendo a paso ligero que parecían huir educadamente.
 Había leído todo lo que aquel caribeño había emborronado. Sus artículos defendiendo a Fidel Castro. Sus cuentos. Sus novelas. Quería que escribiera algún artículo sobre alguien sentado que había fingido no ver alguna catástrofe importante.Las inundaciones del 25 de septiembre de 1962 en el que habían muerto 815 personas.  Porque el mérito no es no ver. Sino ver,estar en medio y saber fingir no haber visto nada.Y contarlo en otro mundo claro.

Me encantaba este hombre. No era intelectual como esos que te fastidian dando profundidad a cosas evidentes.Ni tampoco transportaba a sus lectores sus conocimientos adquiridos cercanos a una gran tradición metafísica.Sólo contaba historias a las que la gente le atribuía una simbología complicada. Yo pensé que por lo menos querría conocer a gente corriente a la que le cuesta pagar el gas y que acaba de tener luz eléctrica pero tampoco.Yo miraba hacia donde creía que estaba el mar en el horizonte al final de la calle.  Estaba en el púlpito en medio de la escalera de aquel bar.

- Se pueden ver bien a los muertos aquí sin tener que escuchar sus sabandijadas. Gritó mirándome fijamente abriendo los ojos sin párpados, como cuando clavas la luz de la linterna en la noche en un gato pero se lo perdoné porque veía que quería perder sensibilidad.

Es cierto. La gente es estúpida sólo ve las escaleras para subir y para bajar hacia algún lado. Tiene que ponerle sentido. Y cualquier acción para disfrutar tiene que producir sensaciones fuertes o tiene que ser hablar por hablar. Lo mejor de la escalera es que puedes ver a la gente que hace cosas de vital importancia porque hay que hacerlas pero que en el fondo no sirven para nada.

Gabo estaba casado con Mercedes Barcha pero tenía un lío en no sé dónde y siempre estaba amenazando con irse. Pero el único que disfrutaba de su balalaika en la que se iba por los lados junto al oportuno borracho al que le faltaba una paleta era él mismo. Los demás esperábamos alguna frase célebre. Algún consejo literario inmortal. Creo que por eso Neruda dijo de él que era un hombre sano y generoso. Yo amaba a mi mujer y aunque sufría socialmente por no haberle sido infiel no lo necesitaba ya. Aunque tenía la educación de fingir que no se me notara pero se me notaba la envidia callada a la legua. Uno se siente como un pringado desgraciado cuando te encuentras el cinismo de los genios. Pero prefieres obviamente su versión de los hechos. Lo admiraba a pesar de sí mismo pero el preveía mis intenciones y era estricto con la verdad.

Desde el autobús que nos iba a llevar al bar Reinols se veían las callejuelas que salen desde las ramblas. Los edificios conservados elegantemente desde el siglo diecinueve y que  no nos quería enseñar nada. Cuando con una abnegación sin límites como si le ofreciera mi mujer, le cedí mi asiento soltó

-No. Llegaré antes de pié.
-Este hombre no nos va a dar ninguna gran historia.
-No las crea las transmuta. Dijo alguien al aire que no recuerdo quién.
- ¿Saben?. Nos cortó en seco el maestro temiendo que lo despellejásemos vivo. Me gusta cambiar mi rostro, y después afeitarme el rostro para ver como la muerte trabaja sobre mi cara.
La navaja en el cuello sólo me la pone mi peluquero.
Y por cierto, hay que saber colocarse como un señor cuando uno quiere tirarse un pedo en las escalerillas de un autobús sin llamar la atención...
                   
                                              *                     *                             *

Era la primera vez que veía Barcelona y no iban a enseñármela los de la organización del Premio.
¡Era bellísima a pesar de la miseria provocada por la Crisis!  Con un poco de buen gusto se puede multiplicar la belleza de los jardines.

 Fuera de las Ramblas  se oían disturbios con marchas policiales. Habían ocupado una excavadora y una furgona de la policía nacional.
 Había gritos bajo el sol mediterráneo y la brisa e inmobiliario urbano destrozado. De noche había barricadas  por desahucios, por la dificultad de adquirir casas vacías, y algún enfrentamiento con unos policías rezagados, no acostumbrados a la lucha urbana. Y menos en una zona turística.
Muchos eran hijos de los trabajadores de la zona turística que sabían que no podrían trabajar allí.Asaltaban tiendas de imagen y sonidos, las farolas antigüas de diseño, la fachada de los edificios. Era increíble que con tanta gente distinta con tantas historias no tuvieran más escritores. Mi padre del que apenas supe nada era de aquí. Me parecía que me estuviera vigilando porque hacía años que no sabía nada de él. Necesitaba por tanto actuar con especial dignidad.
 Nunca pude entender como viviendo rodeado de tanta belleza se podía tener tanto rencor y ser tan egoísta. El propio Gabo parece que estuvo viviendo en un piso aíslado creando su Universo según lo que veía a través del balcón.


El bar Reinols era un viejo bar de barrio con barra pegajosa donde cualquiera podía proponer un delito a viva voz sin que nadie se sorprendiera. Estábamos lejos de la zona de guerra y no queríamos ir a verla para que no nos influyera.  Había pollitos de papel tirados por todas partes y gusanos que se habían fumado pero nadie se atrevía a volver a pisarlos para no arriesgarse con su Karma. Las personas llegaban dando gritos, sudando con la camisa fuera y fumando. Eran reyes destronados que se tiraban en sus taburetes para quejarse de sus pueblos rencorosos.


Para que él me oyera empece a comentarle a un compañero a mi lado al que apenas conocía la historia de Carmen Broto a ver cómo reaccionaba. Como abandonó la sabiduría de sus muertos en un pueblo  de casas de piedra de Aragón para servir a un gerifalte de Barcelona. Cómo llegó  para servir de sirvienta callada como un perro callejero sumiso y acabó por prostituirse con la promesa de ver la ceremonia de los toros. De tener un piso alto sin ascensor  desde una mecedora del balcón para poder ver las Ramblas que nosotros mismos veíamos los días de odio y fiebre.
 Cómo se hizo amigos de personas poderosas como políticos y obispos con los encantos de adolescentes prematuras. Y cómo le echaron la culpa a un amante moreno que había intentado extorsionarla y que después quiso robarle.
La versión oficial machacada sin convicción en los panfletos de media mano fue una patochada. Parece que había intentado chantajear a algún poderoso, que se había dejado bigote y hacía discursos mientras se colocaban los toreros en el ruedo de las Plazas de Toros. O sea una insinuación del Gobernador Civil de Barcelona.
Se extendió que su ingenuidad la hizo chantajear al estraperlista textil Julio Muñoz con fotografías tomadas mientras mantenía relaciones sexuales en un sofá demasiado bajo con los niños haciendo el puente en posiciones casi acrobáticas.
Que el Obispo de Barcelona estaba cansado de su falta de discreción cuando le traía niñas gallegas de barrios humildes embrutecidas y respondonas. Como este Obispo era un intelectual frustrado que sólo aguantó una semana en un Monasterio Benedictino porque sólo le dejaban hablar en un patio con jardincillo le cogí afecto. Y porque nunca escuché un sermón desde que no eran en latín...
 Lo cierto es que muchos de sus conocidos no le devolvían el saludo por la calle porque la consideraban una delatora que había provocado el fusilamiento de varios anarquistas, molestos para el Régimen, por lo que su asesino el bello policía infiltrado Jesús Navarro se salvaría de la pantomima de juicio para que nadie sospechara.
Una historia con muchas variantes para que el genio la transmutara.

Pero Gabo estaba olvidando sus demonios en el último escalón de la escalera bailando una balalaika con un borracho renegrido mientras le contábamos grandes historias para que nos las escribiera o esperando como unos buitres alguna anécdota. Era triste. Envidiaba a un mexicano enorme con su sombrero de mariachi completamente borracho con la cabeza apoyada en una mesa de madera con hule con un vaso grande de orujo aparentemente.

Una pilingui le acariciaba el gaznate y le tiraba del bigote
- la navaja en el cuello sólo me la pone mi peluquero.


y hacía como que se degollaba. Ella le seguía los ademanes de la marcha  con una blusa gastada y una falda raída le echó el aliento a orujo al oído y se sintió plena al espetarle:
-Tus amigos son una mierda,una mierda...

¡Dios qué triste es todo!
Después de llevar un año esperando a Gabo día a día, día a día... me acordaba de Pablo Neruda en Birmania de joven en medio de la comunidad británica como cónsul acostándose con todo bicho viviente. Yo era Josie Bliss, su pantera birmana. con el paroxismo salvaje de los celos escondía sus telegramas y le miraba con rencor. La mujer que restregaba su rostro en sus zapatos blancos pulidos y se quedaba con el rostro blanco. Haciendo misteriosos ritos para proteger su fidelidad. Hasta que logró zafarse,  en las escalerillas de un barco que iba rumbo a otro consulado de Birmania...

-Que sufrió mucho. Que escribió el "Tango del Viudo". ¡Qué jodío!. Gente sana, sí. Prefiero no saber la  otra versión.Me pondría triste. Dándole a la matraca una y otra vez y otra vez y otra vez con el suicidio. Es posible, suicidio... Bueno,fue época de cosecha para el amor...

A Gabo le habían amenazado varias dictaduras y muchos partidos de derecha. Era raro verlo con su aire sano dentro de una dictadura de derechas.Pero a mí lo que me interesaba eran las escaleras sobre las que murió Carmen Broto. Me perseguían porque era un asesinato que no le importaba a nadie. En mi tierra nadie me tomaba en serio. Me habían dado tantas veces las espaldas que se habían vuelto escaleras infinitas de las que no podía salir.Me había encerrado en el laberinto de mi infancia.
Pensé que Gabo  padrino de tantas historias deshilachadas me entendería.

 Mientras Gabo se ponía a flirtear con acoso como un niño desprotegido a la única mujer  rubia teñida, vestida con un vestido rosa de flores estampadas de rojo con algo de elegancia que había entrado por la puerta con campanilla. Casi daba vergüenza ajena su falta de contención. Aunque nadie ajeno a su cuadrilla le reconoció tampoco nadie se atrevió a llamarle la atención en público. El camarero clavaba la mirada en el cliente que tenía enfrente con evidente tensión esperando a cualquier estímulo para reaccionar.

Fué como una iluminación. Cuando Gabo se le acercó ella le apartó con casi un manotazo en el pecho. Y en el pequeño bar se sentó en mi mesa a mi lado. Estos detalles daban ilusión a mi vida solitaria.
Era como si Carmen Broto hubiese salido de la tumba ante mis plegarias, para que sólo yo contase la historia de las escaleras de su muerte. Y no el gran maestro.
- Es increíble. Tiene usted cara de niño.
Había pedido un refresco de lata. Me pareció ridículo verla con una servilleta de papel se ponía a apretar para limpiar la apertura como si limpiara el pomo de una puerta.

- Ya... y después comenté a destiempo    - uno se enamora de lo que hay...para mí tampoco hay mucho dónde elegir... y señalé a dos mujeres con la barbilla.

¡Qué mujer más contundente! ¡Qué comentario más fuera de lugar!
Para mí era difícil volver a la brutalidad práctica de la vida. A la defensa por encima de todo de mi prestigio y de mis intereses. El niñato está expectante. Admite argumentos.No se deja amedrentar con argumentos  ni gritos. Tiene prejuicios pero puede volver marcha atrás inmediatamente. No es sólido, ni aguanta sus reacciones. Ni ataca, queda eternamente expectante. No sabe mantener las distancias con la mujer sin tener que ser gracioso ni tirarse a sus piés tras 5 minutos de conocerla. Trabaja tú que sabes, siente dolor en tus brazos soporta la humillación con estoicismo. Tú me harás el elogio fúnebre en unas escaleras y me tirarás al mar. Esos son mis intereses mientras veo las cajas apiladas y las latas de refresco tiradas por el suelo. Podría robar alguna ¿no?. ¡ Qué triste es todo!.

Veía el transporte público pasar una y otra vez por eso me aseguraba que la vida no se había pasado por mis argumentos, en aquel barrio con los chavales con sus mochilas. Contar la injusticia de la muerte de Carmen Broto no le haría justicia. Es estúpido pretender que se puede hacer justicia a posteriori, no se puede. Y punto, y eso esta bien.

Gabo bailaba con dos mujeres con aspecto basto y ropa descuidada.A mi lado la mujer rubia que debía conocer a "sus compañeras" puso un gesto agrio. Gabo puso sus brazos por encima de sus hombros para ponerle una guirnalda con sus brazos en homenaje a alguna leyenda olvidada. Por un momento me alegré de dar esquinazo a los elogios fúnebres de los cámaras. No era profesional dejar de morder a una presa muerta cuando te daría de comer un par de semanas en una de esas revistas con algún desnudo por necesidad de la entrevista.

Gabo se fijó en mí de que estuviera hablando con la rubia contundente y dijo:
- el cornudo, los astados unidos. Y se puso a gritarlo una y otra vez como una carraca. Parecía que era la chica de otro rey a punto de retornar con ínfulas de escritor que estaba a punto de volver según la profecía del zapatero Bandarra.

Vino a mí como un forajido en un duelo entre pollitos de papel y gritó frente a mi cara
- hubiese escrito su maldita novela si me hubiese dicho quién fué el asesino después del crimen.
- El asesinato de una puta siempre es algo romántico para un viejo. No por el oficio. Ni siquiera sé por qué... ¿no le parece? no sé.
- Bah, los riesgos son para los hombres valientes. Lo demás no importa.

 Se cogió y se fué cerrando de un portazo la puerta de aluminio  y tropezándose sin caerse del escalón de la salida del bar sin que yo tuviese derecho a réplica.

Tras el shock,el camarero de la funeraria se acercó a mí con rostro tenso y con un libro. Sería el primer autógrafo de una publicidad adelanta que hacía su efecto por fin. Me tendió el libro con protocolo, estirando el brazo hasta mi barbilla.
- Señor, esta es la cuenta de usted. El otro señor tenía que irse porque tenía una cita.

Era la cuenta infausta. No sólo con lo mío, sino con lo de Gabo y lo de sus chicas que después del incidente se había dado el mutis para no darme explicaciones. Miré al camarero y vi que no tenía escapatoria, que incluso se había sentido engañado por el caribeño con sonrisa sana y cara de buena gente. Había estado en el baño. No podía escapar por el ventanuco.
                                                     
                                                    *                    *                    *

No volví a verlo ni por el Hotel, ni por el barrio, ni en la televisión salvo un par de entrevistas cortas por el parte de noticias. Sólo le volví a ver cuando le dieron el Nobel pero entonces no le podía pedir que me pagara. Ni que escribiera la historia de las escaleras de Carmen Broto.
Así me quedé con el perro callejero ambigüo de mis sentimientos al genio simplón al que no pude engañar y al seductor impenitente que ni presentaba mujeres ni pagaba sus copas.

Pero me hice una foto con la factura como si fuera el autógrafo que Gabo no quiso darme.