Alicia atraída por la madriguera

Alicia atraída por la madriguera

miércoles, 23 de julio de 2014


Es inhumano no tomar partido.
Es mucho más fácil criticar o insultar a alguien en público que trabajar por ese alguien

Cuando fuí en Julio de 1998 con las ilusiones de una vida con mi padre y su mujer, mi madrastra creía que todo iba a salir muy bien.El primero, que no había hecho nada por mí en los 19 años que tenía. Y la segunda que me tenía como una carga por la que se "tenía que sacrificar" no hacían más que criticarme por ser un inútil o porque yo no le habría educado así. Yo me imaginaba una alegría fáustica y ahora me sonrio con amargura de mi inmadurez.   Pero en 7 meses nunca me enseñaron nada salvo ordenar mi cuarto y hacerme la cama. Y cuando dejaba alguna arruga era un complot según ella para joderla y ponerle furiosa.

Es inhumano no tomar partido: significa la marginación total y pensar que cualquiera que ha trabajado duro tiene ideas sublimes es estúpido. No es así. Sobre todo el que ha trabajado duro, y trabaja por dinero ayuda a los demás en su coto. Después, no me molestes y tienen la áspera razón.
Criticar lo hacen todos y se sienten que estuvieran trabajando por ello. Aunque en realidad no se hacen más que las víctimas y lo grandes que son por asumir esa carga. Mártires y héroes
 En realidad trabajar por el otro exige una auténtica paciencia, ponerse en el lugar del otro, respetarlo e imponerle disciplina aunque se nos rebele porque a la larga sabemos que su odio se tornará en amor del convincente.

Trabajar por los demás es un acto absoluto de amor no hacer de cura o dar sermones. Por tanto un cura es algo doblemente inútil, sólo el trabajo nos une a la vida y sólo desde allí se puede aprender algo de verdad.
Cuántas veces uno no ve algo por televisión y se sorprende cuando está allí de cuerpo, de la visión real de lo que ha visto durante décadas en el telediario. Dios, todo lo que me han contado decenas de personas no tiene nada que ver salvo en matices con lo que estoy percibiendo aquí ahora entiendo los detalles que me explicaban tan minuciosamente.
                                  *            *          *

Como no tenía costumbre en el trabajo era patoso para pelar papas o clavar tablas. Mi madre me había mimado y su esquizofrenia paranoide sin tratar con la que había convivido 19 años había ido solapando más y más trastornos depresivos. Yo era pálido y delgado y aunque mi padre pasó por lo mismo que yo: convivir con la locura, se le olvidó por indolencia o memez. Era otro que espoleaba.  Pero eso eran chorradas y excusas victimistas.
 Sin embargo aunque había conseguido algún resultado me gritaban cómo podía ser tan inútil y tan flojo. Y así me gritaban con la poca capacidad que tenía para aguantarlo. Nunca consuelo, nunca ánimo, nunca apoyo.
Que si yo no sabía hablar español y que tardaría dos años en aprenderlo. ¡Aunque era mi lengua materna y apenas hablaba con acento canario!
O que el acento canario parecía de maricas flojos. ¿Y que vamos a hablar del de Badajoz de pueblo de donde era mi madrastra? Uno se acostumbra a vivir la ruindad, se contagia.
14 años después contaba a mi novia las anécdotas ruines de mi padre y mi novia me decía:
 Dios Alfonso,¡basta!¿ cómo te puedes reír a carcajadas con una historia tan asquerosa?.
Era cierto, los odios compartidos nos hacen justificar lo imposible. Perder el respeto a la dignidad humana de aquellos que nos han destrozado la vida. Hay que tener altura de miras.


Lo difícil es apoyar y trabajar por alguien hasta tal punto que eso es lo único que cuenta y lo único que se traspasa con dignidad a las historias. Amar a alguien sin trabajar por alguien no es del todo amor, es atracción y sensualidad.
Trabajar por alguien no significa hacerle todo para convertirlo en un niño mimado y un inútil. Todo lo contrario para quitarle las muletas y echarlo a andar con las piernas temblando al principio.

Es duro recordarlo pero en el interior nos satisfacemos por la muerte del que creíamos que tenía un deber con nosotros y nunca hizo nada. Salvo dar su opinión en forma de insulto, cómo si eso valiera algo.
A las personas las aceptas o no las aceptas pero de los muertos aceptas todo menos las deudas. Al fin y al cabo el dinero de un canalla puede hacer buenas obras.

No hay comentarios:

Publicar un comentario