El terrible asesinato del epidemiólogo Juan Peset en 1941.

Un apunte sicológico: ya sean los famosos y propagandistas comunistas Miguel Hernández, o el chileno Víctor Jara tras el golpe de Pinochet, tuvieron la oportunidad real de huir, pero por diversos motivos prefirieron quedarse y al final se los cargaron, como era bastante previsible. Igual que a Juan Peset de Izquierda Republicana, compañero de viaje de los comunistas, ¡vivía en 1941 en plena dictadura franquista y pensaba que no le iba a ocurrir nada! Sorprende tanta ingenuidad. Sin embargo, José María Escrivá de Balaguer que se escapó de morir dos veces de los rojos sabía que se lo querían cargar desde el comienzo, incluso cuando no había hecho nada contra la 2ª República salvo ser un religioso.