Alicia atraída por la madriguera

Alicia atraída por la madriguera

jueves, 28 de mayo de 2015

PUTIN presidente de Rusia manda un ataque contra Ucrania

Hoy no tendré que esperarte
a que me des otra paliza

¿Qué miedo tienes a la plenitud que tiene que llenarte?,
¿qué puedes perder en la sabiduría
de los bares de la autodestrucción?
¿por qué te quejas que pudiste decir mucho más
de lo que calló Pessoa cuando no pudo ser nadie?
No pudiste ser Kant aunque lo soñaste
mejor de lo que se conoció Kant.
No pudiste replicar nunca tantos insultos
pero en tu falsa sutileza llegaste a lo sublime
hasta que arrastrándote reconociste tartamudeando
tu secreto a tu mejor amigo
que te lo derrumbó de un puñetazo
y entre dos carcajadas dijo que era vanal.


Perros sanguinarios
por aquí   no respires hondo      por allá
nos buscan porque nos aman
como nosotros les buscamos

Que me maten ¿que más da?

En ti hay una eternidad que tú no imaginas
y que solo conozco de las sobras
del amor que me das.

Vive vieja viuda de tus mentiras
y acuéstate con un niñato vírgen
Mira los geranios de plástico
no dejes que tu amor insaciable intime
con la eternidad del motor de los coches.
Uno el techo recuerda de noche
la muerte eterna para que nos vigile.

A mi madre le dieron el electroshock
que no intima.
Fué el amor que me robó
y que intenta vender a camellos como una baratija.

Tu sexo me necesita
y mis pantallas no quieren
lo que tú serías
sino verte empujando y dando tumbos
como sierpes q rebotan de balazos
en un desierto sin sagrarios.

Tu amor me eleva como el humo negro
de los neumáticos quemados
y me hace arrancar fetos de la madre
ángeles prematuros de la alguna muerte.

A mi madre le dieron el electroshock
 en las ruinas humeantes de Berlín,
una bola de plástico entre los dientes
 la lengua rota con serrín,
mientras merodeaban los violadores
que no aparecieron por allí,

no se puede amar con tus ojos
de galgo histérico y rampante
ni escupirte tras limpiarte el cutis
sobre una estatua a la que el banquero
quiso sacar dinero masturbándose.

Los altos edificios lo demuestran todo
la civilización,el trabajo duro,el carácter,los tornos,
las penínsulas desarratadas
donde murieron los besos
y tu cuerpo no dice nada
como una galaxia de piedras y grava.

Menos el amor más allá de la eternidad
que viene y va de la arena defraudada.
Proxeneta defensor de la mujer
relicario verde que haces huir a la gente honrada
y el mar que hace huir a Dios
para que reinventemos el amor en la grava.

Su cuerpo heroinómano tremulaba
y gritaba sin saber qué decía Hitler.
Y yo siempre siempre sin réplica
como si callar supusiera no ver.
Personas de aquí y de allá
que como tiburones sedientos de sangre
miran la aurora en la eternidad.

Das espasmos como la vieja puta heroinómana
das espasmos como al moribundo del que se quieren vengar
la muerte es tan vanal cuando solo parece un disparo
y me pides con orgullo dinero para estafarme
y yo te robo para hacerme un ángel profanado.

Solo los ángeles profanados saben amar.
Solo el ángel que casi muere asfixiado
en el váter de su vomito
puede ver en ti el océano de agua vaciado.

Cuántas humillaciones tienen los adoquines
y piensan inyectar anestesia a los pollitos
para que no sufran.
Y a los fusilados sin nombre whisky
de garrafón. Qué delirio.


Alquilo un apartamento por un mes
para que ningún admirador me siga.
Mis amistades de 5 minutos
para que nadie descubra mis mentiras.
Yo como un huérfano amnésico
caminaba por ese puente de Londres
y con el esperma llena la garganta
no me servía de excusa para no hablar...
había gritos de heroinómanos subieron las cloacas
para morir en la luz de mi voz.

No podía caminar más por el camino de Santiago
hasta ver la estatua de Pound que no estuvo allí
y hacer más por la penitencia que nunca quise prometer
por la deuda que nunca
consiguieron mis verdugos
por robar la marihuana a la puta acabada
antes de dictar leyes en el sotano de Wenstminster.

Quise llorar,quise luchar, quise reír,
pero no pude llegar más lejos no pude,
pero no pude al no querer masturbarme al ver
tus cuerpo destruído, tus pechos destrozados
como un cuervo que se revuelve
en un cuerpo que no puede destripar bien.

Sin embargo tú lo ignoraste
el griterío machacón de los niños
a los que querías violar,
los edificios compactos ante el amanecer
a los que querías atracar y golpear
para soñar con la sonrisa del que tira el dinero,
querías el honor
de los desharrapadas familias de negros
eructando felices en la playa de Brighton.

Ya sé que bailaste sobre la tumba de Franco
eras una niña y no sabías lo que hacías,
los invitados me echaron en cara
que no hubiera banquete en tu boda
¿ soy culpable porque no existía?...

Querías la moral eres un falso de un pueblo
de casas de piedra con un brochazo de pintura.
Y ya no hay nada porque estúpidamente
no queda nada salvo sol y motivos.
Queda la imaginación moribunda
de las cigüeñas que ya no tienen parroquias.
Las gaviotas que no pueden picotear
en las chabolas de las putas miserables en la costa.

Hoy no tendré que esperarte a ver que vuelvas del trabajo
tú trabajo limosnero de la parroquia
que para humillarte te hacían firmar como donativo.
(Tú firmabas con ironía Stella Díaz Varín
aunque eres una puritana retrógrada).

Hoy no tendré como te saltas los semáforos
en rojo histérica para ponernos el cianuro en el colacao,
más temprano siempre más temprano
con tu medio camisón de dormir.
Hoy no tendré que esperar tus sagradas patadas
desfiles insignificantes para quien se masturba
como rebeldía también sagrada para profanar
 sus recuerdos  en el rincón de la escalera.

Saber si estás ¿en qué hospital por un accidente
sin monumentos entre un amasijo de hierro?
¿no tendré que robar la marihuana
a las prostitutas acabadas para vender
y tener algo que comer que no sea limosna?
Ni que reír hoy no tendré nada que imaginar,
Hoy no tendré nada que inventarme
sobre esta Dasein estúpida de plástico,
turística con miles de turistas jóvenes,
ansiosas de recuerdos de la última noche.

Sí, hoy no será la última noche,
su última noche de vacaciones,
igual que la hipocresía del magistrado
que condena en los demás lo que él es,
Será el micrófono minúsculo
de las bellas verdades del político demagogo
que viendo que su público se aburre
y da un berrido con un chiste soez
al que acaban de coger en una grabación robando.

Hoy las miles de luces de los hoteles de Maspalomas
no volverán a escupirte tu flema,
Hoy los condones usados en las aceras con pegastostes
no besarán tus labios profanados
por pelotas de goma y cloroformo.
Será la leyenda urbana de una mentira más

Será una mentira ridícula más por dignidad
que la gente responde impertinente
con una réplica hiriente,dura ,hostil,
como las tripas que ordeñan los ojos
al salir del matadero.
                              Pero llena de verdad
que elegí para quitarme la poca dignidad que tengo.
Y que nadie cree que la gente es así
y que es así porque lo ve todos los días
como la gravedad que nadie descubre.
Bajo el acantilado de piedra seca del Puente de Guía
vi cangrejos resecos de los suicidas
que han chupado y escupido
para no llegar a no amarse en su vida.

Sí esa esta noche la larga noche de la eternidad
en que yo elegí tu locura
en que yo no sabía lo que hacía,
en que uno no recuerda ni muerto
en que elegí la mentira
por un poco de dignidad.

Será será aquella leyenda estúpida
que da sentido a tantas cosas
que en cuanto la gente se la cree
es estúpida darle un sentido lógica.
Tu cuerpo famélico lleno de estrias...
tus dientes separados,pequeños
que no se pueden quedar en pié
sin las muletas de las paredes
manchadas con tus manos
y tus reglas olvidadas tantas veces.



Jroñe cajroñe, cre nom cre nombre

TÚ que viviste en tu mentira
y que quisiste morir no demasiado viejo
para vivir en la mentira
cuánto te quisieron.

Te enseñaré de la vida
mis palabras serán tus recuerdos.
Y todo para salvar el pellejo
de tu piel sierpe de gravilla.

¿Quién me querrá a mí
seguro que no importa
pero querría saberlo?

Dios no sabías nada de la vida
pero tampoco eras un canalla
¿qué será de ti en mi recuerdo?

Y todo para salvar tu pellejo
de tu piel sierpe de gravilla.

A nadie ya se le puede exigir la grandeza
los arbustos siguen retorciéndose
por el viento
aunque no sepa su nombre.

Callado en los tratados abuelo
Papa Matías ya queda menos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario