El Príncipe al que a usted le gustará odiar, dar la espalda, insultarle a la cara y escupir su cadáver.

Carlos de Inglaterra es el Príncipe al que todo el mundo le gusta odiar por pusilánime y por la tragedia de Lady Di. Su padre Felipe de Edimburgo fue cien veces más racista, impertinente, miserable con sus hijos y le puso los cuernos muchísimo más a Isabel II,(alguno replicará que fue 35 años antes y por tanto otra época) pero fundamentalmente no le perseguía el fantasma de Lady Di. Cualquier crítica contra Carlos es válida. Según el diario El País: "El día del compromiso, Carlos de Inglaterra se preguntó cómo sería el aspecto de los futuros hijos de los duques de Sussex. El episodio se ha relacionado con las declaraciones de Enrique y Meghan a Oprah donde acusaron de racismo a la familia real". El comentario es desafortunado pero si se le escapó tampoco es para airearlo en prime time en televisión. Se corrige en privado y se olvida. Esta generación de príncipes tampoco me parece responsable.