La maldición: indecisión

Triunfa de una vez, decídete.
No te olvides que te levantaste
con el deseo de oír los gritos de los niños
yendo al colegio,
con el ruido del borbollar del café,
de los motores de los coches,
o al supermercado a comprarte
con extraña vergüenza el menú,
o para oír los alegres gritos
e interrupciones de una tertulia política,
que buscabas no sé qué paz
por no sé que calle tuya,no sé.


No tengas miedo de una vez, decídete arrebata.
más de algún amigo esperará a que te mueras
para que no te lleves más la contraria.
Tira la luz de las ramas a lo alto
tira tus sueños locos.Trabaja.

No te preocupes de la mediocridad
si no huyes de verdad
siempre vivirás en la mediocridad
sana,fuerte,satisfecha del trabajo,
de respuestas contundentes y claras.

No te preocupes de la decisión correcta,
la marea volverá a bajar
la gente volverá a pasear
por la orilla
y a jugar cansada al fútbol,
cualquier decisión con esfuerzo
será la decisión inevitable,la correcta,
la que maldigas sin excusas,sin remedio.

Decídete y volverá a encapotarse
por fin el cielo,y a brillar el sol
cuando solo mires
al edificio de enfrente.