...¿y mi réplica?
Me quitaron la voz de la réplica
me quitaron la niebla
de la bandera y quedaron
naufragios que ondea la marea.
Me gritaron para que no hablara
me quitaron la boca
no me dijeron decir la verdad
en cadenas de loca.
- Tú me entiendes y no me entiendes
- Quieres dominarme.
Pero no te entiendo
porque no quiero arrodillarme.
Tras la muerte se regresa mal
voces se disputan los recuerdos
y no quedan las obras
sino la enseñanza de los muertos.
La palabra es un jarro de fresas
muerdes y sale otra sangre
y te hace cosquillas tu propia sangre
de un pecho roto que inventas.
La palabra es la vergüenza
de la niña en cinta incestuosa
encerrada en su cuarto en sus cosas
amargada en extraños planetas.
La palabra es flor prematura
que pincha y se cierra y frágil
cae rendida al sol despojo ágil
que grita veredictos sin cura.
La palabra cigüeña de paso
que por campanarios picotea
deja almenas recuerdos sin nevera
solemne paso de payaso.
La palabra es el pomo que mueve
el padre maltratador cuando llega,
y el niño por el pasillo desespera
o huir o abrazar al que le pegue.
La palabra es huella sin rostro
que la marea una y otra venga,
es jacoso que busca la huella
de su rostro quien la pide a otro.
Quien te partiera la cara
quien te rompiera la boca
quien te rompiera los dientes
y tus pechos en mi boca
en mi boca,en mi boca.
No hay comentarios:
Publicar un comentario